La sorprendente caída de Asun, árbitra del 'Grand Prix', al decir ¡No tengo palabras!
En un sorprendente giro de eventos, la árbitra del prestigioso 'Grand Prix', Asun, ha generado conmoción en el mundo del deporte al admitir no tener palabras para describir su experiencia en el último encuentro. La experimentada árbitra, conocida por su imparcialidad y profesionalismo, se ha visto abrumada por la situación, lo que ha llevado a cuestionamientos sobre su capacidad para arbitrar en eventos de alto nivel. La reacción de Asun ha generado un gran debate en las redes sociales y en los círculos deportivos, donde muchos se preguntan qué podría haber llevado a esta situación y qué implicaciones tendrá para el futuro de la árbitra en el mundo del 'Grand Prix'.
Árbitra del 'Grand Prix' se desmaya al decir '¡No tengo palabras!' ante la caída de concursantes
Las pruebas de Grand Prix son muy divertidas para los espectadores, sobre todo los más pequeños, pero también complicadas. Así se demostró durante la noche del lunes, donde se enfrentaron los pueblos de Ondara (azul) y Santo Domingo de la Calzada (amarillo).
Era el turno del equipo amarillo en la prueba de los 'pingupatos'. Participantes vestidos con grandes disfraces de pingüinos y patos debían pasar por una cinta mientras el equipo contrario les daba con grandes pelotas.
El presentador Ramón García no daba crédito a que tantos concursantes cayeran al suelo antes de la mitad del recorrido. ¿Pero esto qué es? preguntaba, incrédulo.
Tantos cayeron, que incluso Asun, la árbitra del programa, se desmayó. ¡Mira Asun! se cercioró el presentador.
Una chica vestida de pato cayó nada más subir en la cinta, se llevó a la mujer por delante, que llegó rodando al otro extremo a lo ancho del cacharro. Eso sí, con risa. ¡Ha sido ella! señalaba a la patita tras la prueba, con todos riendo.
¡No tengo palabras! contestó García.
Ser árbitra del #GrandPrixTVE tiene sus riesgos. ¿Estás bien, Asun Langa (@LangaAsun)? se preguntaba.
¡Aquí están hasta los árbitros por el suelo! se divertía Ramón.
Finalmente, cinco pingupatos de Santo Domingo de la Calzada lograron pasar la cinta y esquivar las pelotas, mientras que el equipo contrario solo lo consiguieron tres.
La prueba fue un éxito y demostró que, en Grand Prix, cualquier cosa puede pasar.
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