Las seis banderas negras de la costa de Cataluña por contaminación y mala gestión
La costa de Cataluña, conocida por su gran belleza y atractivo turístico, se enfrenta a una situación crítica en cuanto a la calidad de sus aguas y la gestión de sus playas. La contaminación y la mala gestión han llevado a que seis de sus playas más populares sean condecoradas con la bandera negra, un símbolo que advierte a los visitantes sobre el riesgo para su salud. Esta situación es preocupante, no solo por el impacto en la salud pública, sino también por las consecuencias económicas que puede tener en la industria turística de la región.
Cataluña tendrá seis banderas negras en 2024, según informe de Ecologistas en Acción
La asociación Ecologistas en Acción ha determinado que Cataluña tendrá seis banderas negras en 2024, tras realizar una inspección de más de 8.000 kilómetros del litoral español. Cada provincia recibe un máximo de dos banderas negras, una por la mala gestión ambiental y otra por la contaminación de las aguas.
La provincia de Tarragona, la más afectada
La provincia de Tarragona es la más afectada, con dos banderas negras. La primera es por la contaminación de la playa de La Pineda, que recibe la mayor producción de pellets de preproducción, según un informe del Ministerio de Transición Ecológica. La causa de esta contaminación se atribuye a la mala gestión de los residuos de las industrias petroquímicas, que se escapan por las alcantarillas de aguas pluviales.
La segunda bandera negra de Tarragona es por mala gestión, y se dirige a un proyecto impulsado por la Diputación de Tarragona y Costas del Estado. Se trata de la construcción de un vial de seis metros de ancho en el espacio de la finca del preventorio de la Savinosa, lo que afectará gravemente a los hábitats de interés natural existentes en dicha finca.
Las dos banderas negras de Barcelona
Barcelona cuenta con dos banderas negras. La primera es por contaminación, y se dirige a la artificialización de la costa del Maresme, que cuenta con cinco puertos deportivos y 18 espigones artificiales en un tramo de 46 kilómetros. La asociación ha denunciado que la Generalitat perjudica la adaptación de este espacio natural al cambio climático.
La segunda bandera negra de Barcelona es por mala gestión, y se dirige a las tres chimeneas de Sant Adrià del Besòs. Se quiere desarrollar un proyecto para construir casi 2.000 viviendas, oficinas, comercios y hoteles en una zona inundable, lo que recuerda la contaminación de este espacio y marca el paisaje.
Las dos banderas negras de Girona
Girona cuenta con dos banderas negras. La primera es por contaminación, y se dirige a los impactos de las embarcaciones privadas en la Costa Brava, que erosionan el entorno natural, dañan la biodiversidad marina y generan situaciones de riesgo por la falta de control de sus actividades.
La segunda bandera negra de Girona es por mala gestión, y se dirige al Ayuntamiento de Llançà, que ha aprobado provisionalmente un Plan de Mejora Urbana (PMU) para construir 62 viviendas en un terreno de La Farella, último pinar a orillas del mar de Llança y un reducto de vegetación y fauna mediterránea.
Estas son las seis banderas negras de Cataluña en 2024, que reflejan la gravedad de la situación ambiental en la región.
Ecologistas en Acción ha señalado que la mala gestión y la contaminación son problemas graves que afectan a la costa catalana, y ha llamado a las autoridades a tomar medidas urgentes para proteger el medio ambiente y la biodiversidad.
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