Los bares cierran un verano apagado y advierten que la demanda nacional ha alcanzado su límite
La temporada estival ha llegado a su fin, y con ella, el sector hostelero ha cerrado un verano apagado en cuanto a ventas y ganancias se refiere. Los dueños de bares han advertido que la demandanacional ha alcanzado su límite, lo que ha llevado a una disminución en el número de clientes y, por consiguiente, una reducción en las ganancias. Esta situación ha generado inquietud en el sector, que se ve obligado a reinventarse y buscar nuevas formas de atraer a los consumidores. En este sentido, los expertos coinciden en que es necesario implementar nuevas estrategias para revitalizar el sector y afrontar los desafíos que se avecinan.
Un verano apagado: bares cierran con pérdidas y alertan sobre la demanda nacional agotada
Con la llegada de septiembre, la temporada de verano en los bares ha concluido, y según los hosteleros, ha sido floja en cuanto a la facturación prevista. Además, la demanda nacional ha tocado techo, lo que se debe a varios motivos, entre ellos, la disminución de la capacidad de gasto de los consumidores, que han mostrado una actitud de contención.
El secretario general de Hostelería de España, Emilio Gallego, ha afirmado que, a pesar del incremento en la llegada de turistas extranjeros, el consumo en el propio país se ha reducido notoriamente. El 75% de los hosteleros ha considerado que esta temporada estival ha sido igual o peor en comportamiento respecto al verano de 2023, mientras que para un 23% ha sido mejor, según una encuesta entre los asociados de la organización.
Además, un 44,5% ha constatado un descenso del número de clientes, porcentaje que aumenta cuando se refiere a la caída del gasto (57,7%). El motivo de la caída se debe en parte a la ampliación respecto a los años anteriores de la temporada alta, que se extiende ahora desde junio a octubre, y a un mayor número de viajes al extranjero por parte de los nacionales.
Las condiciones climáticas de lluvias y frío en algunas zonas y olas de calor en otras, y el impacto de la subida de precios en general que lleva a una reducción de la renta disponible del consumidor, han precisado.
La dinámica ha sido diferente según el mes
En julio, los propietarios de bares han notado una caída de la cifra de negocio respecto al mismo período de 2023. En agosto, no obstante, se ha producido un mantenimiento con respecto al año anterior. En concreto, según la media de estos dos meses, la mitad de los encuestados cree que la facturación ha sido hasta un 10% menor que la del verano pasado, mientras que para un 23% ha sido igual y el 26,7% ha constatado un incremento de hasta un 10%.
Según la patronal, se ha apreciado una mayor contención del gasto especialmente en el cliente habitual y el turista nacional, mientras que ha aumentado el de los extranjeros, el cual solo en julio realizó un gasto de un 15,5% superior en manutención respecto al mismo mes del año anterior.
Además, la evolución en los negocios ha sido diferente según la zona y el tipo: por ejemplo, la costa mediterránea ha registrado un mejor comportamiento, con un crecimiento de hasta el 5% respecto al 2023, mientras que se ha reducido el ocio nocturno.
Preocupación por la falta de empleados
Por otro lado, los bares y los restaurantes mantienen su preocupación respecto a la falta de empleados: más de la mitad de los hosteleros considera que ha tenido dificultades a la hora de encontrar trabajadores. Este problema, unido a los elevados costes, tanto de precios de los alimentos y bebidas como de personal, ha supuesto un descenso de la rentabilidad de los negocios, según han advertido.
Los datos de la Seguridad Social, por su parte, han mostrado que julio contó con 1.179.275 afiliados en el sector de la restauración, mientras que en agosto ha disminuido a los 1.176.868 afiliados; cifra que es un 3,4% mayor a la de 2023.
Las empresas de reservas por internet también han hecho balance de los principales datos hosteleros, como es el caso de la plataforma de TheFork (ElTenedor), donde han destacado el incremento del tique medio del verano en un 3% respecto al resto del año. En total, los consumidores han pagado por cada comida y cena 27 euros de media, y se ha producido un alza en las reservas del 10%, con Barcelona, Madrid y Mallorca como las regiones que han concretado un mayor porcentaje.
La plataforma hostelera ha estimado que tres es la media de comensales que se hace en la reserva, una cifra que se mantiene invariable respecto al resto del año. Tenerife, con un incremento del 48%, se ha situado como la provincia que ha registrado una mayor subida de las reservas digitales, en comparación con el año anterior, seguida de Las Palmas, Girona, Cádiz, y Málaga.
En cuanto a la procedencia, el 24% de las reservas registradas por la plataforma ha sido realizada por turistas internacionales, mientras que los nacionales han realizado el 8% del total.
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