Más de 2.400 detenidos, incluyendo 50 profesores, en manifestaciones universitarias en EE. UU. desde el 18 de abril
En un giro inédito en la historia de las protestas estudiantiles en Estados Unidos, más de 2.400 personas han sido detenidas desde el 18 de abril en manifestaciones universitarias que han sacudido a todo el país. Entre los detenidos se encuentran 50 profesores que se unieron a los estudiantes en su lucha por mejoras en la educación y reformas en la política universitaria. Estas cifras sin precedentes ponen de manifiesto la creciente indignación de la comunidad académica estadounidense, que exige cambios urgentes en el sistema educativo. A continuación, se presentará un análisis detallado de los eventos que han llevado a esta situación y las consecuencias que se avecinan.
Más de 2.400 estudiantes y 50 profesores detenidos en manifestaciones universitarias en EE UU
Una oleada de protestas propalestinas y contra la ofensiva israelí en la Franja de Gaza ha sacudido las universidades estadounidenses, llevando a la detención de más de 2.400 estudiantes y 50 profesores en más de 50 campus de todo el país.
Entre los detenidos se encuentran dos maestros de 65 años, Annelise Orleck y Steve Tamari, según registros de la policía, juzgados y noticias revisadas por la cadena estadounidense CNN. Orleck, judía, fue reducida y maniatada con bridas por agentes en la Universidad Dartmouth de New Hampshire, mientras que Tamari, palestino-estadounidense, fue derribado y detenido durante una manifestación en la Universidad Washington de San Luis, Misuri.
La profesora Orleck relató que la detención fue como una invasión armada. Había una línea de policías antidisturbios con cascos y porras. Jamás había visto nada parecido en sus más de tres décadas de docencia.
En la mayoría de los casos, los profesores participaban en las protestas para apoyar a sus estudiantes y en defensa de la libertad de expresión, pero también había profesores que lo hacían por convicción.
Presión conservadora y acusaciones de antisemitismo
Estas protestas se producen en medio de un incremento de la presión desde sectores conservadores, incluidos donantes de estos centros privados, que critican que las universidades se hayan convertido en bastiones del pensamiento woke o progre, acrecentado desde los ataques de Hamás desde la Franja de Gaza y la identificación de protestas propalestinas con antisemitismo.
Las universidades habitualmente se atrincheran en el respeto a la libertad de expresión mientras defienden la necesidad de mantener el orden. En muchos de los casos han autorizado la entrada de fuerzas de seguridad para desmantelar acampadas y han dictado medidas de expulsión y sanciones disciplinarias contra participantes en las protestas.
Peligro para la libertad académica
El director de la Asociación Estadounidense de Profesores Universitarios, Isaac Kamola, ha resaltado que la detención de profesores se convierte en momentos virales que atraen la atención, pero el peligro está en las amenazas a la libertad académica.
No se ven los momentos más sutiles, cuando un profesor es retirado de la enseñanza o se le sanciona en un proceso arbitrario. Los profesores no saben con seguridad qué pueden y qué no pueden decir, ha apuntado. La situación se agrava en el caso de profesorado interino que se siente tremendamente vulnerable.
Kamola se ha lamentado además de que se haya normalizado tener a policías en el campus cuando debería limitarse a un debate académico.
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