En un hecho que conmueve la conciencia colectiva, un taxista ha sido condenado a seis meses de cárcel por cometer un delito de odio en contra de una pareja de lesbianas en la ciudad de Barcelona. Esta sentencia es un paso importante hacia la justicia y la igualdad, y un recordatorio de que la discriminación y el odio hacia personas LGBTQ+ no tienen cabida en nuestra sociedad. Es fundamental que sigamos trabajando para construir una sociedad más inclusiva y respetuosa, donde todas las personas sean tratadas con dignidad y respeto, sin importar su orientación sexual o identidad de género.
Condena a taxista que agredió a pareja lesbiana en Barcelona
El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha confirmado la condena a seis meses de cárcel y multas que suman 1.350 euros para Angel P.R., un taxista que agredió e insultó en 2019 a una pareja de lesbianas y a una amiga de ellas en la discoteca Row de Viladecans (Barcelona).
El TSJC ha desestimado los recursos presentados por la defensa del taxista y ha confirmado la condena de la Audiencia de Barcelona a Angel P.R. por un delito contra el ejercicio de los derechos fundamentales y tres delitos de lesiones, que incluye indemnizaciones a las víctimas que suman 1.652,59 euros.
Hechos del caso
Según la sentencia, Angel P.R. se encontraba con su vehículo en el aparcamiento del establecimiento cuando vio a las dos chicas besándose, momento en que comenzó a increparlas, llamándolas guarras, bolleras de mierda y esto es lo que os gusta.
Después de que las insultara, una de las víctimas golpeó con la mano el coche que conducía el acusado con ánimo de indicarle que se apartara de ellas, motivo que provocó que el hombre se bajara del taxi.
Una amiga de la pareja se interpuso para protegerlas, momento en que el taxista la cogió de la muñeca y la derribó al suelo pegándole un puñetazo en la cara, lo que la dejó inicialmente inconsciente; con el mismo ánimo agredió a las otras dos chicas.
Motivación de la agresión
La sentencia establece que que las insultó y golpeó con ira es evidente que fue por su orientación sexual.
Angel P.R. había denunciado también -en un caso de denuncias cruzadas- a la pareja y a la amiga que iba con ellas, porque presuntamente le habían provocado desperfectos en el vehículo pegándole una patada y le habían agredido, aunque el tribunal dictó la absolución para las tres mujeres.
Deja una respuesta