Suiza otorga recompensa de 52.000 euros a quien desbloquee el misterio de los proyectiles perdidos en sus lagos
La Confederación Helvética ha lanzado un llamado a la comunidad científica y a los entusiastas de la historia para resolver un enigma que ha intrigado a los expertos durante décadas. En efecto, desde hace años se han encontrado proyectiles perdidos en los lagos de Suiza, sin que se haya podido determinar su origen ni el contexto en el que fueron lanzados. Ahora, el gobierno suizo ofrece una recompensa de 52.000 euros a quien logre desentrañar este misterio, esperando que la investigación y el análisis científico permitan revelar la verdad detrás de estos enigmáticos hallazgos.
Suiza busca innovadora solución para recuperar municiones en lagos
La Oficina Federal de Contrataciones de Defensa de Suiza (Armasuisse) ha lanzado una convocatoria para encontrar una solución respetuosa con el medio ambiente para recuperar munición sumergida en varios lagos suizos entre 1918 y 1964.
La munición en cuestión es considerada problemática, ya que se trata de excedentes y obsoletos, pero en perfecto estado, e incluso partidas rechazadas de producción. Estas municiones se encuentran a unos 150 y 220 metros de la superficie en los lagos de Thun, de Brienz y en el de Lucerna.
Un desafío para el medio ambiente
En 2005, se llevó a cabo una evaluación de las posibles técnicas de recuperación de estas municiones. Sin embargo, todas las soluciones propuestas en ese momento hubieran provocado una enorme turbulencia de lodos y hubieran supuesto altos riesgos para el sensible ecosistema de los lagos.
La munición sumergida está cubierta por una fina capa de sedimentos de hasta dos metros de espesor. Si los sedimentos se agitan durante la recuperación, podría perderse oxígeno, que a esa profundidad sólo está disponible en pequeñas cantidades. Como consecuencia, se podría dañar el ecosistema del lago.
Grandes retos para la operación
Armasuisse ha apuntado a otros factores que suponen grandes retos para la operación, entre otros:
Escasa visibilidad, riesgos de explosión, profundidad del agua, corriente, dimensiones de la munición (de cuatro milímetros a 20 centímetros de tamaño y de 0,4 gramos a 50 kilos de peso), estado de la munición al encontrarse sumergida. Algunos detonadores están hechos de cobre, latón o aluminio.
Un premio para el ganador
Las ideas para recuperarlas se podrán presentar hasta el 6 de febrero de 2025. Tras ser evaluadas por un panel de expertos, el resultado se anunciará en abril y los tres mejores proyectos recibirán un premio en metálico de 52.763 euros (50.000 francos suizos).
Aunque el organismo no tiene previsto implementar las ideas presentadas de forma inmediata, ha señalado que estas podrían servir como base para aclaraciones adicionales o para iniciar proyectos de investigación.
La Oficina Federal de Contrataciones de Defensa de Suiza busca una solución innovadora y respetuosa con el medio ambiente para recuperar estas municiones y proteger los ecosistemas sensibles de los lagos suizos.
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