Terror en el asiento del conductor: Alumna sufre un momento de confusión durante su examen de conducir: 'Imaginaos los nervios que tendría'
La ansiedad y los nervios pueden jugar malas pasadas en situaciones de estrés, y un examen de conducir es uno de los momentos más críticos en el que se pueden manifestar. Una joven alumna lo experimentó en carne propia cuando se presentó a su prueba de manejo. La confusión y la incertidumbre se apoderaron de ella en el asiento del conductor, llevándola a cometer un error que dejará a todos con la boca abierta. ¿Qué sucedió exactamente en ese instante de terror? ¿Cómo reaccionó la joven ante la situación? A continuación, te contamos la historia que ha generado gran revuelo en las redes sociales.
Momento de confusión en el examen de conducir: ¿qué pasó?
Presentarse al examen de conducir es una situación temida por la mayoría de las personas que se postulan para ello. El estrés o la falta de confianza son algunos de los motivos que pasan factura a la hora de la verdad y que pueden perjudicar a la hora de aprobar la prueba.
Este fue el caso de una joven aspirante que relató su historia en el programa Las Mañanas Kiss, de la emisora Kiss FM. La chica confesó que estaba muy nerviosa desde el primer minuto de la prueba, aunque iba preparada y mentalizada para ella.
Me monté en el coche, me preparé, me puso el cinturón y coloqué el retrovisor, comentó la chica sobre su preparación antes de empezar a conducir. Sin embargo, la confusión llegó cuando el examinador le preguntó por su nombre.
Ella entendió que tenía que salir del vehículo y pedir permiso para entrar, por lo que retrocedió en los pasos que ya había realizado, cerró la puerta y llamó a la ventanilla para que le dejaran entrar: Pensé que me decía que se tenía que llamar primero. Imaginaros los nervios que tendría para hacer eso, apuntó entre risas.
Finalmente, la joven realizó el examen entero y logró aprobarlo, pero la embarazosa situación fue lo más comentado en la autoescuela durante años, aseguró ante los micros del programa.
Este incidente nos recuerda que, a pesar de la preparación y la confianza, el estrés y la nerviosidad pueden jugar una mala pasada en momentos clave como el examen de conducir.
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