- Títulos de seguros privados se lanzan al mercado 'low cost', pero ¿corren el riesgo de morir bajo el peso del éxito?
- Seguros privados en España: ¿un éxito que corra el riesgo de morir bajo el peso del éxito?
- La explosión del mercado de seguros privados en España: calidad vs cantidad
- El crecimiento de la sanidad privada en España: ¿un negocio lucrativo que se convierte en un problema de acceso y calidad?
Títulos de seguros privados se lanzan al mercado 'low cost', pero ¿corren el riesgo de morir bajo el peso del éxito?
En un mercado cada vez más competitivo, las companías de seguros están apostando por la oferta de títulos de seguros privados 'low cost', una tendencia que se ha popularizado en últimos tiempos. Estos productos de seguros asequibles buscan atraer a un público más amplio, ofreciendo coberturas personalizadas a precios más bajos. Sin embargo, detrás de esta aparente oportunidad de negocio se esconde una pregunta crucial: ¿corren el riesgo de colapsar bajo el peso del éxito? ¿Serán capaces de mantener su sostenibilidad financiera en el largo plazo, o se trata solo de una moda pasajera?
Seguros privados en España: ¿un éxito que corra el riesgo de morir bajo el peso del éxito?
El mercado de seguros privados en España ha experimentado un crecimiento significativo en los últimos años, pero, paradójicamente, este éxito puede estar llevando al sector a una situación crítica.
La explosión del mercado de seguros privados en España: calidad vs cantidad
Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), el gasto medio por persona en seguros de salud se situó en 512,48 euros en 2023, un aumento del 6,6% respecto al año anterior. Esto se traduce en un crecimiento del 6,1% en la recaudación de primas de los seguros individuales y un 9,7% en la de los seguros colectivos. Sin embargo, este aumento en la cantidad de personas con seguro privado no se ha traducido en una mejora en la calidad de los servicios.
La tendencia al crecimiento de hogares con seguro privado se frenó en 2023, cuando la tasa de familias que destinan parte de su presupuesto a la contratación de un seguro privado relacionado con la salud bajó del 23,63% al 23,19%. Esto ha llevado a las organizaciones de consumidores a denunciar un alargamiento de las listas de espera y un empeoramiento general de la atención por parte de los centros médicos.
El crecimiento de la sanidad privada en España: ¿un negocio lucrativo que se convierte en un problema de acceso y calidad?
La proliferación de seguros colectivos y los precios competitivos han llevado a un aumento en el número de usuarios de la sanidad privada. Sin embargo, este crecimiento no ha ido acompañado de un incremento en la infraestructura sanitaria, lo que ha llevado a un aumento en las listas de espera y un empeoramiento en la calidad de la atención.
La Fundación Instituto para el Desarrollo e Integración de la Sanidad (Idis) ha señalado que los tiempos medios de espera para la citación en consultas externas ha experimentado una subida en todas las especialidades. En dermatología, la media era en 2023 de 22,7 días (frente a los 14,6 de antes de la pandemia) y en ginecología y obstetricia, de 16,2, frente a los 12,2 de 2019.
La Mutualidad General de Funcionarios Civiles del Estado (Muface) es otro tema de preocupación para el sector. La macroaportación que hace a la demanda de servicios sanitarios privados la propia administración pública ha generado una fuerte competencia entre los operadores privados por captar nuevos usuarios.
El Gobierno ha planteado una subida media del 12,5% para los dos ejercicios (24% en 2025 y 1% en 2026), pero las principales entidades de la sanidad privada, Idis y la Alianza de la Sanidad Privada Española (Aspe), han alertado de que estas primas son insuficientes y pueden generar pérdidas millonarias en el sector.
Aspe ha alertado de que las primas apuntadas por el Gobierno no garantizan la plena accesibilidad de los trabajadores públicos a los servicios sanitarios en todo el territorio y urge a equiparar las primas por mutualistas al gasto sanitario por ciudadano.
El problema es que las primas actuales generan pérdidas en la prestación del servicio, por lo que, de no corregirse, más centros privados rechazarán prestar servicios a los asegurados por Muface, algo que ya ocurre en la actualidad. Esto generaría “un éxodo a la sanidad pública de un número relevante de mutualistas y familiares y, por consiguiente, un potencial incremento de las listas de espera”.
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