En la era de la flexibilidad laboral y la autonomía profesional, los empleados están tomando el control de sus vidas y estableciendo prioridades que van más allá de las fronteras del horario laboral. En este entorno, surgen los Títulos Silenciosos, una nueva tendencia que se centra en la importancia de equilibrar la vida laboral y personal. Estos profesionales no solo se enfocan en sus metas laborales, sino que también buscan realizar sus objetivos personales y darle más valor a lo que es importante en su vida. En este artículo, exploraremos cómo los empleados están trascendiendo el horario laboral y encontrando un equilibrio entre el trabajo y la vida personal, y qué implicaciones tiene esto para las empresas y los líderes.
La nueva ambición laboral: dejar que el trabajo no gobierne la vida
Los tiempos están cambiando, también en el mundo laboral. La necesidad de subir peldaños que antaño suponía todo un reto, incluso la ansiedad de muchos, ahora parece que ha pasado a un segundo plano, para algunos al final de un extenso listado de prioridades. Los éxitos profesionales ya no ocupan la mente de los trabajadores, algo que se ha convertido en una corriente y que tiene un nombre importado de Estados Unidos. Se llama quieter ambition y parece que la incertidumbre durante y después de la pandemia de la covid ha sido lo que lo ha provocado. Ascender no es el objetivo, vivir, sí.
Según Cristina Saura, directora de Recursos Humanos (RRHH) y miembro de la Asociación Española de Directores de Recursos Humanos (AEDRH), las reglas del juego han cambiado. Estamos viendo que las motivaciones del personal, incluso de la gente que está en procesos de selección, ahora son distintas. Se preocupan de la flexibilidad horaria, del tiempo de trabajo, de la opción de teletrabajo, beneficios y retribución flexible., desgrana.
Saura no ha vivido todavía la situación de que uno de sus empleados renuncie a un ascenso en pro de su vida, pero sabe que es algo que ya está llegando a las empresas españolas para quedarse. Según un estudio realizado en Estados Unidos en agosto de 2023 por Visier, solo el 38% de los trabajadores del país se mostraron interesados en convertirse en jefes en su empresa, es decir, un 62% prefiere mantener su puesto de trabajo. En este sentido, tener más presión y estrés y trabajar más horas es la principal razón para no aceptar un ascenso para el 40% de los encuestados.
El equilibrio entre la vida laboral y personal es el valor más importante
En Europa las cosas no son muy distintas. Otro estudio realizado este año por la compañía Maize a 2.018 ciudadanos de distintas generaciones de Italia, Francia, Alemania, España y Suecia, determina que el equilibrio entre la vida laboral y personal es el valor más importante para todos los estratos de edad. Además, añade que la experiencia mundial de la pandemia podría ser el único factor que hizo que todas las personas estuvieran de acuerdo en este punto.
De ahí, que los trabajadores, sobre todo la generación Z, hayan puesto el foco en ambiciones más mundanas. No todo es trabajar, sentencia Saura. Es una generación que por el hecho de que haber vivido cuatro años en pandemia dan más valor a lo que ahora es importante en su vida. Parece que hemos sido conscientes de la vulnerabilidad.
Algo con lo que coincide el psicólogo Carlos Losada, vocal de la Sociedad Española de Psicología Clínica (ANPIR). Ha habido un pequeño cambio en la forma de ver el trabajo después de la covid. El contacto con el encierro, con la enfermedad. lleva a plantearse qué haces con tu vida y si eso te compensa, cuenta el experto.
La salud mental, un factor clave
Losada, además, apunta a la facilidad con la que alguien puede ser despedido para que las personas opten por no asumir más responsabilidad. Antes había más posibilidades de tener una carrera profesional. La gente ahora se da más valor porque están analizando el entorno y tomando decisiones, explica.
Para Losada, que ha trabajado durante años tratando a personas que se encontraban en cuidados paliativos, la mayoría de la gente no se arrepentía de haber trabajado menos. El psicólogo hace hincapié en que lo que más valora alguien cuando se va a morir son las relaciones personales.
Con respecto a la salud mental, Losada, que ahora trabaja en prevención del suicidio, cree que hay mucha más tendencia a la autoexigencia en el trabajo que a la quiet ambition, algo que para él es un factor de riesgo. Un trabajo puede ser muy beneficioso, pero también puede ser, en ciertas dosis, perjudicial para la salud mental de los trabajadores, asegura.
Según el estudio de Maize, en España el 53,6% de los encuestados tiene como máxima prioridad el equilibrio entre la vida personal y el empleo. Además, el documento muestra que existe una fuerte demanda por parte de los trabajadores de todas las edades para que las organizaciones ofrezcan un mayor apoyo en diferentes periodos de sus vidas laborales con políticas de bienestar y beneficios.
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