Un pasajero de Rodalies denuncia que debe arrastrarse por las escaleras para llegar a la estación de Sant Vicenç de Calders
Una impactante denuncia ha generado conmoción en la región de Cataluña. Un pasajero de Rodalies ha denunciado que, debido a la falta de accesibilidad, se ve obligado a arrastrarse por las escaleras para llegar a la estación de Sant Vicenç de Calders. Esta situación inaceptable ha generado una gran preocupación entre los usuarios del servicio de transporte público y ha llevado a cuestionar la falta de medidas para garantizar la accesibilidad universal en las estaciones de tren. En este sentido, se exigen soluciones urgentes para garantizar que todos los usuarios puedan acceder a los servicios de transporte de manera segura y digna.
Denuncia de un pasajero de Rodalies: escaleras sin ascensor en la estación de Sant Vicenç de Calders
Un campeón paralímpico de levantamiento de pesas de España, Carlos Correa, ha denunciado a través de las redes sociales el mal estado de la estación de Rodalies de Sant Vicenç de Calders (Barcelona) para los usuarios con movilidad reducida. Correa, quien utiliza silla de ruedas, compartió un vídeo mostrando la difícil situación que enfrentan los usuarios con discapacidad al acceder a la estación.
En el vídeo, se puede ver a Correa arrastrándose por las escaleras para poder acceder a la estación, ya que el ascensor de la estación ha estado estropeado durante más de un mes y no ha sido reparado. Además, el tren en el que viajaba no estaba adaptado para personas con discapacidad.
Una situación inaceptable
Correa calificó la situación como una VERGÜENZA y lamentó que los usuarios con movilidad reducida tengan que enfrentar semejante situación para acceder a un servicio público esencial como el transporte ferroviario. Es una vergüenza tener que arrastrarme por las escaleras, ya que en esa estación llevan más de un mes sin ascensor, además de tener que viajar en un tren que no estaba adaptado, escribió en su publicación.
En el vídeo, se puede ver a Correa recibiendo ayuda de otros usuarios y un guardia de seguridad ajeno a lo que está sucediendo, lo que hace que la situación sea aún más difícil y peligrosa para los usuarios con discapacidad.
Una estación no adaptada
La estación de Sant Vicenç de Calders no está adaptada para personas con movilidad reducida, lo que hace que el acceso a la estación sea un verdadero obstáculo para los usuarios con discapacidad. La reparación del ascensor está pendiente y no hay una fecha estimada para su arreglo.
Este incidente pone en evidencia la falta de accesibilidad en los servicios públicos y la necesidad de tomar medidas urgentes para garantizar el acceso a todos los ciudadanos, independientemente de sus condiciones físicas.
Esperamos que esta denuncia ayude a concienciar a las autoridades y a los responsables del transporte público sobre la importancia de garantizar el acceso a los servicios públicos para todos los ciudadanos.
(Habrá ampliación.)
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