En un gesto de solidaridad y compromiso con las víctimas de la violencia, un destacado político nigeriano ha decidido tomar medidas para brindar apoyo a 100 jóvenes víctimas de ataques criminales que han perdido a sus seres queridos y se encuentran en busca de un nuevo hogar y una segunda oportunidad. Estos jóvenes, que han sido víctimas de la violencia y la inseguridad en su país, han visto truncadas sus vidas y ahora buscan una oportunidad para reconstruir sus vidas. El político nigeriano ha decidido comprometerse con ellos, brindándoles apoyo emocional, financiero y psicológico para que puedan superar este difícil momento y encontrar un camino hacia una vida más estable y segura.
Ayuda solidaria: político nigeriano se casa con jóvenes víctimas de ataques criminales
En un gesto de solidaridad y compromiso con las víctimas de la violencia, el presidente de la Asamblea Estatal del estado nigeriano de Níger, Abdulmalik Sarkindaji, ha anunciado que se casará con cien huérfanas que han perdido a sus progenitores en ataques de grupos criminales y bandidos en la región de Mariga.
Según informa el diario nigeriano 'This Day', Sarkindaji ha prometido pagar la dote de las cien novias para materializar la boda el próximo 24 de mayo, asumiendo todos los gastos de la ceremonia conforme al rito islámico y garantizando su alojamiento.
Un gesto de alivio para las víctimas
Tendrán las comodidades y las casas conyugales como cualquier otra chica que se casa según la costumbre islámica, ha destacado el político nigeriano en una rueda de prensa desde Minna. Este casamiento se hace con la mejor intención y permitirá aliviar el sufrimiento de las pobres.
Sarkindaji no ha querido revelar la edad de las chicas y solo ha explicado que las cien novias han sido seleccionadas de un grupo de 170 mujeres que fueron presentadas como candidatas.
Apoyo institucional
El gobernador del estado de Níger, Mohammed Umar Bago, y el emir de Kontagora, Alhaji Mohammed Barau, serán los guardianes de las novias huérfanas hasta el momento de la ceremonia.
Este gesto de solidaridad y apoyo institucional es un ejemplo de compromiso con las víctimas de la violencia y la pobreza en Nigeria.
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