En un sorprendente suceso que ha conmocionado a la comunidad agrícola de Zamora, un ternero exceptional ha nacido en una granja de la provincia con características inusuales y récord. El pequeño animal, que ya ha generado gran interés entre los expertos y la opinión pública, presenta dos bocas y cuatro ojos, una rareza que no tiene precedentes en la cría de ganado. Este fenómeno natural ha sido reconocido por el Libro Guinness de los Récords, que ya ha certificado este nacimiento como un récord mundial. A continuación, profundizaremos en esta historia asombrosa, que ha generado gran interés y asombro en la región.
Un prodigioso nacimiento en Zamora: nace un ternero con dos cabezas y cuatro ojos en una granja de la provincia
En la localidad de Piñuel de Sayago, en la provincia de Zamora, ha nacido un ternero con una grave malformación: dos cabezas pegadas, cada una con sus dos ojos. A pesar de esta anomalía, el animal ha logrado sobrevivir más de 48 horas.
El ganadero Miguel Fuentes Garrote, propietario de la explotación ganadera, explicó que en los casi 48 años que lleva en el oficio, nunca había visto un caso como este. En los primeros momentos, fue amamantado por su madre y posteriormente alimentado a base de biberones por mí, relató.
La vaca que dio a luz al ternero con dos cabezas es una hembra reproductora que ha tenido unos quince partos y siempre ha criado a todos los terneros, no se le ha muerto ninguno, según el ganadero. También es una vaca muy recia y con carácter.
El ganadero logró rescatar al ternero con ayuda de una pala de tractor y desde entonces lo ha alimentado a base de biberones, a veces hasta dos a la vez, uno para cada boca. Sin embargo, el animal empezó a mostrar signos de debilidad este jueves por la tarde.
Al principio tragaba, ahora lo que chupa por una boca lo echa por la otra, explicó el ganadero, que ve mucho más débil a ese pequeño y vaticina que le quedan pocas horas de vida.
El atípico ternero procede de una vaca que es cruce de raza Blonda con Limusina preñada de monta natural de un toro Limusín. Aunque el ganadero no tiene esperanzas de que sobreviva más allá de este viernes, admite que lo donaría encantado para que lo estudiara la ciencia.
Imagino que es un caso digno de estudiar, con esos dos cerebros y cómo se compaginan, apuntó el ganadero.
Si sobrevive, el ternero podría establecer un récord Guinness, pero por ahora, su futuro es incierto.
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