Un verano más seguro: la cifra de incendios forestales en España disminuye un tercio y la superficie quemada se reduce un 50%.

Un verano más seguro: la cifra de incendios forestales en España disminuye un tercio y la superficie quemada se reduce un 50%.

En un verano marcado por la sequedad y el calor, España puede considerar un auténtico éxito la reducción significativa en la cifra de incendios forestales. Según los últimos datos, la cantidad de siniestros se ha reducido un tercio respecto al año pasado, lo que supone un importante avance en la lucha contra este tipo de desastres naturales. Pero no solo eso, ya que la superficie quemada también ha registrado una importante disminución, con una reducción del 50% en comparación con el mismo período del año anterior.

Un verano más seguro: la cifra de incendios forestales en España disminuye un tercio y la superficie quemada se reduce un 35%

Cinco días de lucha incansable por parte de cientos de personas fueron necesarios para frenar las rápidas llamas que ocasionó un vehículo accidentado en el municipio de La Estrella, Toledo, un fuego que culminó el 10 de agosto con 2.300 hectáreas de terreno calcinadas.

El incendio de La Estrella (Toledo) es el segundo más grande del verano en España, detrás del de Andújar (Jaén), con 3.600 hectáreas en pleno hábitat del lince, pero es paradigmático de cómo se ha desarrollado este verano la temporada de incendios forestales en España.

La lucha contra incendios forestales: un éxito este verano, pero la conciencia es fundamental para prevenir futuras tragedias

A modo de balance, la buena noticia del verano en cuanto a incendios forestales es que ha habido un tercio menos de fuegos y casi la mitad de superficie quemada respecto a la media del último decenio. Sin embargo, no se han reducido los grandes incendios forestales (GIF), aquellos que superan las 500 hectáreas, y cada vez más núcleos habitados se ven seriamente comprometidos por fuegos en pastos y matorrales ante la falta de paisajes mosaicos, usos distintos del suelo, que servirían de cortafuegos naturales.

El Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico (Miteco) se encarga de publicar las estadísticas oficiales de incendios forestales y su avance público comprende desde el 1 de enero hasta el 25 de agosto. En ese plazo se han producido 4.742 fuegos, un 35% menos que la media del decenio, situada en 7.359. El número de hectáreas calcinadas ha llegado a 42.314, frente a una media anual es de 79.077. Y ha habido 16 grandes incendios forestales, en la media del decenio.

Elena Hernández, jefa de servicio en el departamento de defensa contra incendios forestales de Miteco, explica que la incidencia de incendios en España, como país del arco Mediterráneo, suele reflejarse en una estadística de dientes de sierra, con años de más y otros de menos incendios. Hernández indica que en las proximidades de un año muy malo como lo fue el fatídico 2022 (con 55 super incendios y 250.000 hectáreas calcinadas) se suelen suceder años mejores.

Quiero pensar que la conciencia ha aumentado después de que la gente viera en 2022 tan de cerca el peligro, con evacuaciones, fuego cerca de sus casas y grandes incendios en los titulares de las noticias, día sí y día también. En situaciones extremas te conciencias, al menos a corto plazo, reflexiona.

Un verano menos incendiario: la cifra de incendios forestales en España disminuye un tercio y la superficie quemada se reduce un 35%

La meteorología también ha jugado un papel clave esta temporada, agrega Hernández. Hasta junio lo que nos mostraba el mapa de España es que la mitad oeste y norte tenía un acumulado de lluvias suficiente, pero la situación en el este y el sureste, incluida Canarias, era mucho más precaria debido a la sequía. Esperábamos incendios dramáticos. Sin embargo, un junio húmedo y frío y que, aunque haya hecho calor haya habido menos olas de calor sucesivas ha jugado a nuestro favor.

En la asociación ambientalista WWF también achacan la disminución en el número total de siniestros a que la población ha tomado conciencia del peligro que suponen los incendios forestales, sobre todo en periodos de alto riesgo (verano) y se evitan accidentes, asegura Lourdes Fernández, su responsable del área de incendios forestales, quien añade la importancia de una mayor persecución del delito.

En España, la estadística dice que el 80% de los incendios forestales tienen origen en la actividad humana. La mitad son de tipo intencionado, pero en gran medida están vinculados a accidentes o negligencias en los usos del fuego en el mundo rural. Según el ministerio de transición ecológica, las campañas que alertan del riesgo de los incendios para las personas y la biodiversidad, y restringir ciertas actividades susceptibles de iniciar igniciones, propicia los buenos datos.

Seguridad en el verano: la cifra de incendios forestales en España disminuye un tercio y la superficie quemada se reduce un 35%

Menos incendios, los mismos GIF. Lourdes Fernández, de WWF, sin embargo, insiste en destacar que este verano con un menor número de incendios totales ha habido el mismo número de GIF, lo que para su organización viene a confirmar que los incendios tienen cada vez un carácter más agresivo.

Desde la ONG consideran que ahora hay un mayor riesgo de que un incendio se te vaya de las manos y se complique la situación. Y, al final, este es el problema de fondo: que estamos viendo una escalada generalizada en la virulencia de los incendios, no solo en España y en Europa, sino que es algo que está ocurriendo en todo el planeta.

En WWF consideran que los incendios forestales han dejado también de ser exclusivamente problemas rurales para convertirse en sociales. Al tener un carácter más agresivo entran más en zonas pobladas, en donde se juntan lo forestal y lo urbano. Ahí los servicios de extinción se tienen que enfocar, como es natural, en proteger vidas y bienes, dejando un poco de lado el bosque lo que hace al final hace que el control sea más complicado, advierten.