En el sector energético español, un conflicto ha estallado entre el Consejo Nacional de Mercados y Competencia (CNMC) y las principales empresas eléctricas del país. La discrepancia surge a raíz de la retribución que se otorga a las empresas por invertir en las redes eléctricas, considerada 'insuficiente' por parte de las empresas. Según las empresas eléctricas, la retribución no es suficiente para compensar los costos de inversión y mantenimiento de las redes, lo que podría afectar la seguridad y la calidad del suministro eléctrico. Por su parte, el CNMC argumenta que la retribución es razonable y adecuada a las necesidades del mercado. Este conflicto ha generado inquietud en el sector y ha despertado la atención de los usuarios y los reguladores.
- CNMC y eléctricas en conflicto: la retribución por redes eléctricas se considera 'insuficiente'
- La CNMC fija la retribución eléctrica al %, pero empresas como Iberdrola y Endesa reclaman un %
- El CNMC propone una tasa de retribución financiera para eléctricas, pero sector insiste en un % para mantener la inversión
CNMC y eléctricas en conflicto: la retribución por redes eléctricas se considera 'insuficiente'
La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha fijado la propuesta de tasa de retribución financiera (TRF) para las actividades de transporte y distribución de energía eléctrica para el tercer período regulatorio 2026-2031. Sin embargo, las grandes distribuidoras eléctricas como Iberdrola y Endesa consideran que la tasa propuesta es insuficiente y reclaman un porcentaje más alto.
La CNMC ha establecido una TRF que supera el límite actual del 5,58%, pero no alcanza las pretensiones del sector, que reclama una tasa de entre el 7% y el 8%. La propuesta de circular que incluirá la TRF saldrá a consulta pública entre noviembre y diciembre, con fecha definitiva de adopción prevista para finales de octubre de 2025.
La CNMC fija la retribución eléctrica al %, pero empresas como Iberdrola y Endesa reclaman un %
La CNMC tiene la potestad de fijar la tasa de retribución financiera para las actividades reguladas, pero el artículo 14.4 de la Ley del Sector Eléctrico (LSE) dispone que para cada período regulatorio se establecerá por ley el límite máximo de esta tasa. En este sentido, si al comienzo de un período regulatorio no se llevase a cabo la determinación del límite máximo, se entenderá prorrogado el límite máximo fijado para el período regulatorio anterior.
Las fuentes consultadas no descartan un nuevo enfrentamiento entre la CNMC y las grandes eléctricas como el que se produjo con la retribución correspondiente a 2020. La propuesta de resolución cayó como un jarro de agua fría en el sector al ser globalmente menor que la que se venía liquidando hasta la fecha.
El CNMC propone una tasa de retribución financiera para eléctricas, pero sector insiste en un % para mantener la inversión
Las grandes distribuidoras eléctricas del país, como Iberdrola, Endesa, Unión Fenosa (Naturgy) y EDP, están peleando por la retribución del año 2019, que reconoce las inversiones de 2017. El Tribunal Supremo ha abierto la veda a compensaciones millonarias con las primeras sentencias que afectan a distribuidoras de menor tamaño.
Iberdrola maniobró para intentar que se eleve el límite máximo de la TRF a través de las alegaciones al anteproyecto de ley de restablecimiento de la Comisión Nacional de la Energía (CNE). La eléctrica que preside Ignacio Sánchez Galán pidió otorgar plena competencia a la 'nueva' CNE en la metodología de retribución de las redes eléctricas.
Por su parte, Endesa fue la primera gran eléctrica en pedir públicamente un valor concreto para la tasa. La compañía que dirige José Bogas defiende elevarla en línea con otros países europeos en los que ya ha finalizado la actualización regulatoria de la remuneración de este negocio y reclamó una tasa para España que se sitúe en una horquilla de entre el 7,3% y el 8,7%.
En cualquier caso, independientemente del valor de la tasa, donde parece que el sector se planta y no está dispuesto a ceder es en el reconocimiento acelerado de las inversiones. Las compañías no quieren más sorpresas en las inspecciones y andar luego peleando las retribuciones mediante la interposición de recursos que se alargan durante años.
La presidenta de la CNMC, Cani Fernández, ha intervenido para poner paz en el sector, pero la tensión sigue latente. La CNMC tiene que tomar en consideración el impacto de su propuesta en términos de costes para el sistema respecto del que se derivaría de aplicar el valor anteriormente resultante.
El Ejecutivo tiene derecho a dictar orientaciones de política energética sin imposiciones en cualquier caso, en dirección a que la TRF resulte lo suficientemente atractiva para que las empresas sigan invirtiendo y se alcancen los objetivos del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC).
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