Elna, un encantador pueblo situado en Francia, ha sido el escenario elegido por Puigdemont para anunciar su candidatura a la presidencia de Cataluña. Esta decisión ha generado gran expectación y controversia en el ámbito político tanto nacional como internacional. La elección de este enclave fronterizo no ha sido casual, ya que simboliza la lucha por la libertad y la resistencia. La figura de Puigdemont, exiliado desde hace tiempo, ha vuelto a ocupar titulares al dar a conocer sus intenciones de liderar nuevamente la Generalitat. Este acontecimiento ha reavivado el debate sobre el procés independentista en Cataluña y ha puesto en alerta a diversos actores políticos en Europa.
Elna, el pintoresco pueblo de Francia donde Puigdemont anuncia su candidatura política
En pleno departamento de los Pirineos Orientales, en el sureste de Francia y a escasos kilómetros de la frontera con España, encontramos el pintoresco pueblo de Elna, una villa de arquitectura tradicional rodeada de impresionantes paisajes montañosos. Esta localidad ha saltado al plano político actual, ya que el expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha anunciado en Elna que concurrirá como candidato de Junts a las elecciones al Parlament de Catalunya del 12 de mayo.
Descubre Elna: la villa medieval donde Puigdemont se postula como candidato
Originalmente bajo el nombre de Illibéris, el pueblo de Elna siempre ha tenido un papel primordial en la historia de la zona. De hecho, antaño fue la capital de la provincia histórica del Rossellón, que pertenecía al Principado de Cataluña, una entidad política que existió durante gran parte de la Edad Media y de la Edad Moderna. Esta abarcaba toda Cataluña y el actual departamento francés de los Pirineos Orientales.
El elemento que más destaca de esta coqueta villa francesa en su catedral románica del siglo XI, un majestuoso templo que domina el horizonte urbano. No podemos perdernos su claustro, con un interesante conjunto de esculturas medievales y góticas.
Otro de los lugares más emblemáticos del pueblo es el edificio conocido como Maternidad Suiza. Fue encargado por Eugène Bardou y se levantó en 1902 bajo estilo Art Noveau. Sobresaliendo con su cúpula acristalada, se convirtió en un hospital de maternidad durante la Segunda Guerra Mundial y a día de hoy es un símbolo de esperanza y paz, inscrito en los circuitos de la memoria europea del siglo XX, explican desde Turismo de los Pirineos Mediterráneos.
Si queremos adentrarnos de lleno en la cultura de Elna, una parada imprescindible es el Musée Terrus. Dedicado al pintor Etienne Terrus (1857-1922), expone obras de este artista local, que retrató los paisajes de su tierra natal en sus obras de influencia postimpresionista y fauvista.
Por otro lado, además de caminar por su casco histórico entre murallas, torres y las antiguas puertas de la villa, la localidad también presume de contar con una playa en la Reserva Natural de Mas Larrieu. Este entorno tan rico en biodiversidad nos permite relajarnos en el mar y la arena fina, rodeados de una gran variedad de plantas y especies animales como las libélulas.
El pueblo de Elna se encuentra a solo 20 minutos de Perpiñan por la D914. Desde España, concretamente desde la ciudad de Girona, el trayecto es de 1 hora y 20 minutos por la AP-7.
Deja una respuesta