Barcelona permite la apertura de piscinas municipales durante el verano tras modificación del protocolo de sequía

Barcelona permite la apertura de piscinas municipales durante el verano tras modificación del protocolo de sequía

Tras una revisión exhaustiva del protocolo de sequía, el Ayuntamiento de Barcelona ha decidido permitir la apertura de las piscinas municipales durante el verano. Esta medida supone un alivio para los ciudadanos que buscan disfrutar del calor estival en las instalaciones públicas. La modificación del protocolo ha permitido a las autoridades municipales relajar las restricciones y dar el visto bueno a la apertura de los recintos acuáticos. La noticia ha sido recibida con alegría por parte de los barceloneses, que podrán disfrutar de un verano más fresco y divertido gracias a esta decisión.

Autorización para abrir piscinas municipales en Barcelona tras modificación del protocolo de sequía

El Ayuntamiento de Barcelona ha decidido cambiar la fase del protocolo de sequía a excepcionalidad, una semana después de que el Govern haya levantado la emergencia por la crisis hídrica en el sistema Ter-Llobregat. Esta modificación ha permitido flexibilizar algunas de las medidas vigentes que afectaban a los servicios de la ciudad, entre ellas, la apertura de las piscinas municipales.

Según han detallado en un comunicado, durante la temporada de verano se mantendrán abiertas las piscinas porque todas disponen de un sistema de recirculación del agua, una de las condiciones necesarias para rellenarlas utilizando pocos recursos. Además, también servirán de refugio climático durante los meses que más calor haga, ya que los planes de ahorro de agua en centros deportivos municipales continuarán a pesar del cambio de fase.

Medidas flexibilizadas para el riego de la vegetación

Las medidas también se han flexibilizado en cuanto al riego de la vegetación. Ahora, el arbolado y las plantas arbustivas podrán ser regadas para garantizar su supervivencia en horario nocturno y con agua potable. Sin embargo, los jardines y parques de la ciudad continuarán con las mismas restricciones y no podrán ser regados.

En cuanto a la plantación de arbustos y árboles en las obras de urbanización de las calles, el consistorio ha informado de que se incorporará un sistema de riego gota a gota o con agua freática. En el caso de los huertos urbanos, tanto en los públicos como en los privados, se permitirá el riego de supervivencia, pero se mantendrá la campaña informativa para reducir el consumo de agua, además continuarán estando obligados a utilizar una regadera.

Esta decisión del Ayuntamiento de Barcelona busca encontrar un equilibrio entre la protección del medio ambiente y el bienestar de la ciudadanía, garantizando el disfrute de los servicios públicos mientras se mantiene la conciencia sobre el ahorro del agua.