La reciente noticia sobre Dani Alves ha generado gran preocupación en el mundo del deporte. Tras quedar en libertad, el reconocido futbolista se enfrenta a un gran problema al encontrarse sin equipo, sin patrocinios y con sus cuentas retenidas. Esta situación pone en evidencia la complejidad de la vida de un deportista profesional una vez que finaliza su relación laboral con un club. La incertidumbre sobre su futuro deportivo y financiero se vuelve aún más palpable ante la falta de oportunidades y recursos que solían acompañar a Alves en su exitosa carrera. La comunidad deportiva y sus seguidores aguardan con ansias ver cómo resolverá el jugador esta difícil situación que lo coloca en un nuevo escenario lleno de desafíos.
Dani Alves en libertad: sin equipo, patrocinios ni acceso a cuentas bancarias
Dani Alves ya se encuentra en libertad provisional tras haber abonado la fianza de un millón de euros que pedía la Audiencia de Barcelona. Después de catorce meses y cinco días en prisión provisional, el futbolista ya respira fuera de la cárcel de Brians 2 de Barcelona. El brasileño, a pesar de haber sido condenado a cuatro años y medio de prisión, además de otros cinco de libertad vigilada, ha conseguido esta libertad provisional hasta que se conozca la sentencia firme. No obstante, desde que se conociera la denuncia por agresión sexual, su vida ha dado un giro radical.
Alves ha pasado de ser conocido por ser el segundo futbolista con más títulos de la historia, solo por detrás de Leo Messi y a atesorar un gran patrimonio, a ser condenado por agresión sexual y ver mermado su patrimonio.
Dani Alves, de la gloria al escándalo: despidos, rescisión de contratos y cuentas bloqueadas
La resolución de la Audiencia de Barcelona ha tenido consecuencias que van más allá de la condena. En primer lugar, su antiguo equipo, los Pumas, no dudaron en despedir a Alves en el momento en el que entró en prisión. Además, el club le reclamó una indemnización de 4,5 millones de euros por el escándalo en el que se ha visto involucrado. Este no fue el único ingreso que perdió, ya que en 2023, la empresa de apuestas deportivas 1xPartner suspendió el contrato que tenía con el brasileño y, lo mismo sucedió con la compañía de seguros Hygia Saúde, así como con la marca de ropa Ethika. Sus patrocinios fueron todos ellos rescindidos.
Cuentas bancarias bloqueadas
Asimismo, el futbolista, a pesar de haber percibido suculentas sumas de dinero durante su carrera como futbolista, no puede disponer del mismo. Esto se debe a diversos problemas judiciales con su primera mujer y madre de sus dos hijos adolescentes, Dinorah Santana. Su exmujer tiene abierto un contencioso con el futbolista por la pensión que este le pasa a los menores y, como consecuencia de ello, Alves tiene sus cuentas bancarias bloqueadas.
El brasileño también está a la espera de poder cobrar 9,2 millones de euros por parte de la Agencia Tributaria tras haberle ganado el juicio a Hacienda. Además, tal y como informó La Voz de Galicia, este tendría dos cuentas abiertas en La Caixa: una de ellas sin saldo y otra en la que tiene 51.000 euros. No obstante, tiene que hacer frente a un embargo judicial de 50.000 euros.
Los negocios de Alves
Todo esto es lo que se conoce que le habría quedado al jugador después de haber firmado grandes contratos con el Sevilla, el Barça, el PSG o la Juventus, los cuales le habrían supuesto una fortuna de 55 millones de euros, según Celebrity Net Worth. Además, el futbolista brasileño tendría varios negocios paralelos como la agencia de representación llamada Flashforward Group, que creó con su exmujer, Dinorah con la que también tendría la empresa Cedro Esports. Además, el futbolista también ha tenido una cadena de restaurantes, Alquimia Fogo, tuvo que cerrar con la llegada de la pandemia de la COVID-19.
El futbolista también abrió una tienda de ropa en Barcelona, DM3 Fashion Moda, y lanzó su propia marca de gafas, Bam Bam, además de Treendbam Look Society, una sociedad unipersonal que trabajaba en la comercialización de productos de moda.
Deja una respuesta