En el corazón de La Garrotxa, una región montañosa y llena de encanto en Girona, se esconde un tesoro natural que solo unos pocos tienen el privilegio de descubrir. Se trata de una impresionante piscina de aguas cristalinas, rodeada de paisajes bucólicos y tranquilos, que invita a los senderistas más aventureros a sumergirse en su belleza. Esta joya escondida es el premio perfecto para aquellos que se atreven a explorar los caminos menos transitados y descubrir los secretos mejor guardados de la naturaleza. ¿Quieres descubrir el secreto mejor guardado de Girona? ¡Sigue leyendo!
Descubre el tesoro natural de Girona: una impresionante piscina de aguas cristalinas escondida en La Garrotxa
La provincia de Girona es un destino turístico que presume de ofrecer lo mejor de la naturaleza, con playas y montañas que atraen a todo tipo de viajeros. Sin embargo, en el interior de esta región catalana, se esconde un tesoro natural que merece la pena descubrir: la poza de Gorg Blau, un refugio natural en el corazón de La Garrotxa.
La Garrotxa, un lugar de ensueño
La comarca de La Garrotxa es conocida por el Parque Natural de la Zona Volcánica de la Garrocha, poblado por conos volcánicos extintos. En la zona norte de la comarca, denominada La Alta Garrotxa, se encuentra la minúscula localidad de Sadernes, el lugar donde se parte para llegar a las cristalinas aguas del Gorg Blau.
¿Cómo llegar al Gorg Blau? Este bello enclave es la recompensa de una caminata de 15 kilómetros. La ruta inicia y finaliza en Sadernes, a menos de 20 km de Besalú y de Olot. Tendremos que dejar el vehículo en el aparcamiento cerca del camping de Sadernes, en el que habrá que reservar plaza a través del formulario de la web oficial El Consorci de l'Alta Garrotxa.
La ruta no tiene una gran dificultad técnica, pero es necesario ir con zapatos cómodos, agua y algo de comida. El itinerario está señalizado (carteles amarillos/anaranjados) y transcurre por la riera de Sant Aniol. Partiendo del aparcamiento, hay que dirigirse al Puente d'en Valentí y allí tomar el camino que va paralelo al río.
Con el gorgoteo del agua siempre de fondo y tras varios kilómetros, nos toparemos con la ermita de San Aniol d'Aguja, que nos indicará que queda poco para llegar al Gorg Blau. Nuestro destino lo encontraremos un poco más adelante siguiendo el río: una preciosa poza de aguas turquesas con pequeñas cascadas que completan la postal natural.
Recomendaciones para ir a la poza de Gorg Blau
Antes de emprender la ruta, es importante:
- Consultar la disponibilidad y la reserva de plaza de aparcamiento de Sadernes en la web oficial El Consorci de l'Alta Garrotxa.
- Ver con antelación el parte metereológico. La mejor época para esta ruta es en primavera (tras el deshielo) y en verano.
- Ir temprano para realizar la ruta con calma y de día y evitar una gran afluencia de gente.
- Seguir las señalizaciones y ser respetuoso con el medio ambiente.
- En las pozas, meterse suavemente y poco a poco y no saltar de cabeza (el nado es bajo propio riego).
Con estos consejos y con la determinación de descubrir uno de los tesoros naturales mejor guardados de Cataluña, prepárate para disfrutar de una experiencia inolvidable en la poza de Gorg Blau.
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