La víctima de Monesterio, Manuela Chavero, recibirá sepultura después de ocho años
Después de un largo proceso de dolor y sufrimiento, la familia de Manuela Chavero ha anunciado que los restos de la mujer asesinada hace ocho años en Monesterio (Badajoz) recibirán sepultura el próximo sábado, día 15, en el cementerio de la localidad pacense.
La hermana de la fallecida, Emilia Chavero, ha dado a conocer la noticia en redes sociales, explicando que habrá un acto en la plaza del pueblo a las 18:00 horas, seguido de una misa funeral a las 19:00 horas en la Parroquia de San Pedro Apóstol de Monesterio.
La alcaldesa de la localidad, Loli Vargas, ha organizado todo para darle a Manuela la despedida que se merece. Posteriormente, los restos de la mujer serán llevados al cementerio para que ya por fin pueda descansar en paz.
La familia de Manuela agradece a todos y todas por la colaboración y apoyo durante los ocho años que han vivido desde la desaparición de su hermana y pide a la comunidad que los acompañen en este día tan especial.
El perfil del acusado de matar a Manuela Chavero cumple los criterios de sadismo sexual
La despedida de Manuela Chavero se produce después del juicio celebrado en la Audiencia Provincial de Badajoz, que ha condenado a prisión permanente revisable al autor de su asesinato, Eugenio Delgado.
La sentencia declara como hechos probados que el 5 de julio de 2016, sobre las 02:15 horas, Delgado se dirigió a la vivienda de la víctima tras observar que Manuela Chavero, de 42 años, se encontraba sola dentro de la casa sin haberse acostado aún.
El acusado abordó sexualmente a la víctima en una vivienda que la familia del ahora procesado tiene a 80 metros de la casa de Manuela y que él utilizaba de forma esporádica.
La víctima salió de su casa con la finalidad de recoger una cuna y volver inmediatamente a su domicilio, pero el acusado la abordó sexualmente y le propinó diversos golpes que le causaron graves lesiones.
Finalmente, el acusado causó intencionada y deliberadamente la muerte de la mujer con la finalidad de ocultar su acción delictiva, por lo que cargó el cuerpo sin vida en su coche y lo transportó hasta una finca de su propiedad ubicada en el extrarradio de Monesterio, donde la enterró.
El cadáver permaneció allí hasta septiembre de 2020, cuando sus restos fueron desenterrados por agentes del Equipo Central de Inspección Ocular de la UCO de la Guardia Civil.
La sentencia no es firme y contra la misma cabe interponer recurso de apelación ante la Sala Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura.
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