El PSC rechaza la posibilidad de que Puigdemont sea investido como presidente, advirtiendo que podría generar un bloqueo en la gobernabilidad en España
En un comunicado oficial, el Partido de los Socialistas de Cataluña (PSC) ha manifestado su rotundo rechazo a la posibilidad de que Carles Puigdemont, líder independentista y expresidente de la Generalitat de Cataluña, sea investido como presidente de la comunidad autónoma. Según el PSC, la investidura de Puigdemont podría generar un bloqueo en la gobernabilidad en España, ya que su nombramiento podría ser visto como una provocación por parte del Estado español. Este anuncio llega en un momento clave para la política española, ya que la formación de un nuevo gobierno en Cataluña sigue siendo un tema de debate y negociación entre las diferentes fuerzas políticas.
El Partido de los Socialistas de Cataluña (PSC) liderado por Salvador Illa ha ganado las elecciones catalanas del pasado 12 de mayo, y como consecuencia, no apoyará la investidura de Carles Puigdemont como presidente de la Generalitat.
La portavoz de los socialistas, Nuria Parlon, ha asegurado que los independentistas no tienen una mayoría legítima para reclamar el poder y que su formación es quien ha ganado las elecciones tanto en votos como en escaños.
Nosotros no apoyaremos una investidura de Puigdemont, ha dicho Nuria Parlon en rueda de prensa tras una Comisión Ejecutiva. Primero, porque la mayoría independentista se ha perdido y, por otro lado, porque hemos ganado las elecciones tanto en votos como en escaños.
La portavoz socialista ha sido clara en su mensaje: Eso le tiene que quedar claro a Puigdemont, a pesar de que nos amenace con bloquear la gobernabilidad en España.
La decisión del PSC de no apoyar la investidura de Puigdemont como presidente de la Generalitat es una respuesta directa a la anunciada candidatura del líder independentista, que pretende volver a ocupar el cargo que dejó vacante en 2017.
La victoria del PSC en las elecciones catalanas ha cambiado el panorama político en la región, y los socialistas no están dispuestos a permitir que los independentistas vuelvan a tomar el poder.
La situación política en Cataluña sigue siendo tensa, pero los socialistas están decididos a defender su victoria electoral y a impedir que los independentistas vuelvan a gobernar la Generalitat.
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