Kindelán (AEB) solicita regulación bancaria que fomente el crecimiento y la competitividad económica

Kindelán (AEB) solicita regulación bancaria que fomente el crecimiento y la competitividad económica

En un llamado a la acción para impulsar el desarrollo económico del país, el presidente de la Asociación Española de Banca (AEB), José María Roldán Kindelán, ha solicitado una regulación bancaria que fomente el crecimiento económico y la competitividad en el sector. Según Kindelán, una regulación bancaria adecuada es clave para lograr un entorno financiero estable y dinámico, que permita a las entidades financieras operar con flexibilidad y eficiencia. Al mismo tiempo, destacó la importancia de crear un marco normativo que incentive la inversión y el emprendimiento, y que permita a las empresas españolas competir en igualdad de condiciones en el mercado global.

AEB pide regulación bancaria que impulse crecimiento y competitividad en Europa

Alejandra Kindelán, presidenta de la Asociación Española de Banca (AEB), ha destacado la importancia de que las autoridades comunitarias promuevan una regulación bancaria enfocada al crecimiento y la competitividad ante el comienzo del nuevo ciclo político en la Unión Europea (UE).

La ejecutiva ha abogado por una normativa favorable para el sector financiero durante su intervención en el Diálogo Italo-Español de servicios financieros, un evento organizado junto a la Banche Assicurazioni Finanza (BAF) en Roma.

Objetivos para el crecimiento y la competitividad

Kindelán ha señalado los principales objetivos de las entidades financieras en el actual momento de incertidumbre geopolítica. La presidenta también ha destacado que Europa tendrá que afrontar inversiones billonarias para continuar por la senda del crecimiento.

La presidenta ha defendido el papel protagonista que van a desempeñar los bancos en la financiación de las transiciones ecológica y digital, así como en otras áreas identificadas por la UE como prioritarias para el próximo mandato, como la defensa, la tecnología, la autonomía estratégica o la seguridad económica. Actualmente, los bancos representan entre el 70% y el 75% de la financiación en Europa.

Una visión holística y equilibrada

Tras confirmarse la fuerte resiliencia del sector en las perturbaciones recientes, Kindelán ha pedido ir más allá en materia regulatoria para buscar un enfoque más equilibrado entre la estabilidad financiera y el crecimiento.

Ya no estamos en la situación de la gran crisis del 2012, ahora Europa necesita crecer y competir. Necesitamos considerar mandatos más amplios que también incluyan otras dimensiones como el crecimiento, la competitividad o la eficiencia. Tenemos que ser más pragmáticos, ha sostenido.

Reducir la fragmentación bancaria

Kindelán ha abogado por una visión holística de todos estos requisitos y mandatos normativos, así como por contar con alguien que evalúe la capacidad del sector bancario de la eurozona para atender las enormes necesidades de la economía, su capacidad para competir con los actores internacionales, atraer inversiones de forma sostenida y apoyar a la economía en su crítica coyuntura actual.

La segunda prioridad es para Kindelán completar la unión bancaria y avanzar en la unión de los mercados de capitales. A su juicio, un mecanismo único de garantía de depósitos contribuiría a poner fin a la fragmentación del mercado bancario mediante la garantía de un nivel uniforme de protección para los depositantes independientemente de la ubicación del banco.

Intercambio de datos en igualdad

Por su parte, la directora general de AEB, María Abascal, ha participado junto a la responsable de pagos de ABI, Rita Camproeqale, en la mesa sobre digitalización e innovación, en la que ha pedido analizar los beneficios, costes y consecuencias de las nuevas iniciativas regulatorias.

Abascal ha subrayado la asimetría en el intercambio de datos con otros operadores y el reglamento sobre finanzas abiertas, y ha indicado que FIDA propone nuevas y amplias obligaciones de intercambio de datos para las instituciones financieras, lo que va a generar costes de cumplimiento y profundiza la asimetría en el intercambio de datos respecto a otros sectores.

Por esta razón, ha pedido a los responsables políticos un marco para que el intercambio de datos se haga en igualdad de condiciones y tenga un enfoque intersectorial no solo financiero.