- La directiva del Fútbol Club Barcelona, investigada por la Agencia Tributaria española después de recibir 350.000 euros de una empresa subcontratada sin justificación clara.
- La Agencia Tributaria española investiga a la directiva del FC Barcelona por un pago sospechoso de 350.000 euros
- El FC Barcelona se desmarca
- La oposición amenaza con una moción de censura
La directiva del Fútbol Club Barcelona, investigada por la Agencia Tributaria española después de recibir 350.000 euros de una empresa subcontratada sin justificación clara.
La Agencia Tributaria española ha abierto una investigación contra la directiva del Fútbol Club Barcelona debido a una sospechosa transacción económica. Según fuentes cercanas al caso, la entidad blaugrana recibió 350.000 euros de una empresa subcontratada sin que se haya podido justificar claramente el destino de estos fondos. Esta situación ha generado un gran revuelo en el mundo del fútbol español, ya que se sospecha que esta transacción pueda estar relacionada con irregularidades fiscales o incluso prácticas corruptas. La investigación en curso buscará esclarecer los hechos y determinar si hubo algún tipo de beneficio ilícito en esta operación.
La Agencia Tributaria española investiga a la directiva del FC Barcelona por un pago sospechoso de 350.000 euros
La Agencia Tributaria española ha puesto en el punto de mira a la directiva del FC Barcelona debido a un pago sospechoso de 350.000 euros realizada por la empresa ISL Futbol Limited Liability Company, con sede en Estados Unidos. El pago se realizó en noviembre de 2021 a la cuenta bancaria solidaria a nombre del presidente Joan Laporta y de toda la actual directiva culé.
Según el diario El Periódico, la cuenta bancaria en cuestión fue creada en marzo de 2021, días antes de la toma de posesión de Laporta, y en ella se registraron dos ingresos. El primero fue de 750.000 euros procedentes de JBM Investments 2014 SL, sociedad de un empresario israelí, mientras que el segundo fue de 700.000 euros procedentes de Capital Planet SL, cuyo administrador único es el hermano de Laporta.
Esta cuantía sirvió para subsanar una parte del aval de 124 millones realizado al borde de la fecha límite, ahora investigado por Hacienda. Sin embargo, la coordinación en los pagos ha sido objeto de constantes disputas entre los directivos.
La empresa ISL Futbol Limited Liability Company, que trabaja desde 2015 con el FC Barcelona en proyectos relacionados con las escuelas y campus del Barça en todo el mundo, fue autorizada seis meses después de ese pago a organizar dos partidos amistosos del primer equipo azulgrana en Estados Unidos ese verano.
La empresa ha descrito el pago como un préstamo al club y ha asegurado que no se trató de una contraprestación por la organización de los encuentros.
El FC Barcelona se desmarca
El FC Barcelona ha emitido un comunicado en el que asegura que la aportación económica realizada por la empresa ISL Fútbol Limited Liability Company no generó compensación adicional alguna. Según el club, los directivos recibieron ayudas en forma de préstamo sin otra compensación y en el caso de ISL Fútbol Limited Liability Company su aportación no generó compensación adicional alguna.
La entidad azulgrana ha ido reduciendo en los últimos años su relación mercantil con esta empresa, iniciada en 2015, pero lo ha hecho por las mejores oportunidades que ha encontrado el Club en el mercado, sin perjuicio de que la relación comercial continúe por el alto grado de satisfacción recibido por sus tareas.
La oposición amenaza con una moción de censura
El empresario Víctor Font, oponente a Joan Laporta en las últimas elecciones al FC Barcelona, ha asegurado que no descarta llevar a cabo una moción de censura si se han cruzado líneas rojas en la gestión de la actual junta directiva de la entidad azulgrana.
Font se refirió a la información publicada por el rotativo El Periódico que hace referencia a un caso que no tiene buena pinta, no huele bien, ya que, según él, ahora hay pruebas de que un proveedor del club ha hecho unos pagos para hacer frente a unos gastos que irían a favor de una cuenta de los directivos.
Font ha insistido en que espera transparencia absoluta y que se explique de qué va esto, ya que es muy fácil sumar 2+2 y pensar que a cambio de ese pago se ha proporcionado un negocio, lo cual sería muy grave.
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