En el marco de la crisis económica actual, la empresa Masorange se enfrenta a un delicado proceso de reestructuración, que ha desencadenado una fuerte disputa con los sindicatos sobre el ERE (Expediente de Regulación de Empleo) presentado. La negociación se antoja compleja, ya que los representantes de los trabajadores deben renegotiar convenios y alcanzar acuerdos que garanticen la viabilidad de la empresa sin perjudicar los derechos de los empleados. La situación es especialmente delicada, dado que el futuro de cientos de puestos de trabajo está en juego. En este contexto, la capacidad de diálogo y la voluntad de encontrar soluciones consensuadas serán clave para superar esta difícil situación.
Sindicatos en crisis: El ERE de Masorange divide a los trabajadores y plantea un futuro incierto
La cúpula directiva de Masorange, la 'joint venture' formada por Orange y Másmóvil, se enfrenta a su primera gran prueba de fuego después de la fusión. El Expediente de Regulación de Empleo (ERE) ha puesto a prueba las costuras laborales en la empresa, y ha dividido a los principales sindicatos.
El ERE, que impacta en la plantilla con un recorte sensible, ha sido rechazado por la Central de Trabajadores de Comisiones Obreras (CCOO), mientras que la Unión General de Trabajadores (UGT) y la Federación de Trabajadores de la Comunicación (FETICO) han aceptado el plan.
La falta de unidad social se produce a las puertas de otras negociaciones importantes, como la de los dos convenios colectivos que vencen en diciembre, y la que debería desembocar en un único marco de relaciones con los trabajadores.
El rechazo de CCOO
La CCOO ha rechazado el ERE debido a la falta de voluntariedad total en el procedimiento, ya que se podrían ejecutar despidos forzosos si es necesario para cubrir la totalidad de las bajas acordadas. Además, la falta de mejora de algunas de las condiciones económicas, tanto en los despidos como en las prejubilaciones, ha llevado al sindicato mayoritario a exhibir su negativa.
Esta es la primera vez que se produce un rechazo en los ERE de las grandes operadoras de los últimos años. En el caso de Orange, se han firmado por unanimidad los dos últimos ERE: el de 2016 y el de 2021. En Vodafone, solo el de 2015 fue rechazado por la propia CCOO cuando UGT y STC dieron la luz verde, mientras que los de 2019, 2021 y 2024 se han suscrito con los votos de todos los representantes de los trabajadores.
La negociación del ERE
La negociación del ERE de Masorange se ha caracterizado por la falta de transparencia y la sorpresa de los sindicatos ante las condiciones económicas presentadas en la segunda quincena de negociación. Las mejoras ofrecidas fueron consideradas insuficientes por CCOO, que optó por no firmar el expediente y así tener manos libres para poder acudir a los tribunales en caso de que así lo decidan.
Las condiciones económicas del ERE de Masorange son similares a las del ERE de Vodafone, tanto en indemnizaciones como en prejubilaciones, pero la situación económica es muy diferente, según CCOO. Además, aseguran que había un precedente: las conversaciones se mantenían después de que la dirección confirmara que no habría ninguna medida forzosa.
La dirección de Recursos Humanos, encabezada por Mónica Allés, exjefa de este área del grupo Másmóvil, tenía este ERE como la antesala de otras negociaciones importantes. De hecho, el despido llegó sin que se hubiera conformado un comité de empresa único, al menos de las principales sociedades, como sucede por ejemplo en Telefónica.
La fusión no ha conllevado una unificación de las relaciones laborales. Conviven bajo un mismo techo varios convenios colectivos (con el de Orange como especialmente beneficioso), con condiciones económicas diferentes y con compañías que no tienen ningún tipo de marco laboral fijado.
Quedan menos de tres meses para que venzan los convenios colectivos de Orange España y Euskaltel. Ambos, que afectan a miles de trabajadores, tienen una vigencia hasta el 31 de diciembre.
La negociación del ERE se ha tenido que hacer planteando 'in extremis' una mesa de representación de los trabajadores, pues no ha dado tiempo a combinar todas las estructuras o crear un comité intercentros como tienen otras compañías del sector.
Deja una respuesta