En el complejo escenario geopolítico de Oriente Medio, Palestina se ha convertido en un foco de atención internacional debido a la creciente tensión entre israelíes y palestinos. La disputa por el territorio, la población y la soberanía ha llevado a una crisis de identidad que pone en entredicho la existencia misma de un Estado palestino. La ocupación israelí de los territorios palestinos ha generado un clima de inestabilidad política y social, lo que ha llevado a una serie de conflictos armados y manifestaciones populares que reclaman la autodeterminación del pueblo palestino. En este contexto, es fundamental analizar la situación actual y explorar las posibles soluciones para lograr una paz duradera en la región.
Un Paso hacia la Paz: España se dispone a reconocer el Estado de Palestina
En un movimiento histórico y polémico, España se prepara para reconocer oficialmente el Estado de Palestina, en un momento de gran tensión en el conflicto palestino-israelí. La decisión será tomada en el Consejo de Ministros del 28 de mayo, en plena campaña electoral europea.
El reconocimiento del Estado de Palestina es un acto jurídico regulado por el Derecho internacional y únicamente depende de la voluntad exclusiva de un Estado que decida reconocer en pie de igualdad a otro. Esto permitirá suscribir tratados internacionales y establecer relaciones diplomáticas, algo que, en sentido estricto, no ocurría en el caso palestino.
Actualmente, el Gobierno español mantiene relación con la Autoridad Nacional Palestina, que gobierna de forma limitada en Cisjordania y con cuyo representante, Muhammed Abbas, se ha reunido el propio presidente Pedro Sánchez. Sin embargo, una vez que España reconociera oficialmente a Palestina como un Estado, se necesitarían tres elementos objetivos: el territorio, la población y un Gobierno efectivo y estable.
Un proceso complejo
El reconocimiento palestino va a ser complejo precisamente por las circunstancias del conflicto, explica José Ángel López, profesor de Relaciones Internacionales y Derecho Internacional de Comillas ICADE. No hay un territorio definido y tendría que ser el propio documento de reconocimiento el que, a través de una adenda, defina que fronteras poner.
Además, la situación de la población palestina entraña otras características complejas. Por un lado, hay cientos de miles de refugiados que a lo largo de los años de conflicto se han trasladado a países como Líbano o Jordania, entre otros lugares. Muchos de estos tienen nacionalidad de estos países. Y por otro lado, está la situación actual de conflicto en Gaza, donde López señala que hay una población que se encuentra en pleno éxodo como consecuencia de la ofensiva militar de Israel.
Un proceso paralelo en la ONU
La declaración de reconocimiento por parte de España, junto con Noruega, Irlanda, Malta y Eslovenia, se produce en mitad de un proceso en la ONU en el que también se está debatiendo esta circunstancia. El pasado 10 de abril, una mayoría de 143 estados, de los 193 miembros de la ONU, pidió en la Asamblea General que se reconsiderara la integración de Palestina como estado de pleno derecho.
Pese a la histórica votación, lo cierto es que Palestina continúa sin ser considerado miembro de pleno derecho, ya que esa es una decisión que compete al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. Semanas antes de la votación en la Asamblea, ya se trató de aprobar esto y Estados Unidos vetó la propuesta.
El profesor López asegura que sí que habría ciertos cambios si Palestina llegara a ser miembro de pleno derecho de la ONU. Estados que no han reconocido de ninguna manera al pueblo palestino como un Estado independiente pasaría a reconocerlo tácitamente si finalmente formase parte integrante de Naciones Unidas. A no ser que estos se retiran de la organización, porque de no ser así le están considerando como una entidad igual a ellos.
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