Rusia enfrenta crecientes dificultades para recibir pagos de China deudas comerciales
En el marco de la compleja relación comercial entre Rusia y China, surge una nueva fuente de inquietud para el gobierno ruso. Según fuentes diplomáticas, Moscú está enfrentando crecientes dificultades para recibir los pagos correspondientes a las deudas comerciales contraídas con Pekín. Esta situación se vuelve especialmente preocupante en un contexto económico ya de por sí delicado para Rusia, que enfrenta sanciones internacionales y una economía en recesión.
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Rusia enfrenta crisis económica: pagos de China en yuanes congelados o retrasados
El comercio entre Rusia y China se ha convertido en una apuesta arriesgada, ya que los pagos directos realizados en yuanes están siendo cada vez más congelados o retrasados después de que Estados Unidos ampliara en junio los criterios para imponer sanciones.
Varios grandes exportadores rusos de materias primas afirman que ha vuelto muy difícil, o incluso imposible, realizar pagos directos desde China a Rusia después de la última ronda de sanciones estadounidenses, incluso cuando se utiliza el yuan. Los pagos congelados o retrasados afectan no solo a materias primas como metales y productos agrícolas, sino también a otras industrias.
Dificultades para recibir pagos
La Asociación de Concesionarios de Automóviles Rusos advirtió la semana pasada que las importaciones de vehículos y autopartes de China, ahora el principal proveedor del país, podrían detenerse debido a problemas con los pagos. Los compradores chinos de productos agrícolas rusos también han experimentado problemas con los pagos este mes.
El problema se produjo después de que Estados Unidos ampliara en junio los parámetros para determinar si imponer sanciones secundarias, al ampliar la definición de la base industrial-militar de Rusia. La situación ilustra cómo las sanciones cada vez más draconianas contra Rusia están afectando lentamente a la economía del país.
La economía rusa se tambalea
El banco central ruso admitió en un informe de julio sobre tendencias macroeconómicas y financieras que había observado una disminución en el grado de apertura de la economía rusa, que se refleja en una caída en la participación de las importaciones y exportaciones en el PIB, y un aumento en el papel de la demanda y la producción internas.
Rusia también ha experimentado dificultades en las operaciones con otros socios comerciales importantes, incluidos los Emiratos Árabes Unidos y Turquía, ya que la presión estadounidense sobre los prestamistas ralentiza las transacciones. El comercio con India también ha encontrado obstáculos porque la rupia no es completamente convertible.
China se ha convertido en el principal socio comercial de Rusia tras la invasión de Ucrania por parte del Kremlin en febrero de 2022 y las posteriores y amplias sanciones impuestas por Estados Unidos y la Unión Europea contra Moscú. El comercio entre los dos países aumentó más del 60% hasta los 240.000 millones de dólares en 2023 desde entonces, con Rusia superando a Alemania, Australia y Vietnam en la lista de los principales socios comerciales de Pekín.
El yuan representa ahora alrededor del 40% de los pagos de exportación e importación de Rusia y más de la mitad del valor en el mercado de divisas ruso. Aunque China no se ha unido a Occidente en la imposición de sanciones contra Rusia, los pagos entre los dos países aún han enfrentado obstáculos desde diciembre, cuando Estados Unidos amenazó con imponer sanciones secundarias a los bancos que faciliten el comercio con las industrias relacionadas con el ejército ruso.
Las sanciones estadounidenses y la amenaza de sanciones secundarias ya han llevado a un número creciente de bancos en China que no quieren realizar pagos y liquidaciones de comercio exterior con Rusia. Aquellos que están experimentando problemas a menudo pueden encontrar métodos alternativos de pago, incluyendo el uso de criptomonedas o el enrutamiento de las transacciones a través de ex repúblicas soviéticas como Kazajistán o Uzbekistán, aunque esto añade costos.
Algunos comerciantes aún pueden realizar pagos en yuanes a Rusia, pero solo a través de un número limitado de grandes bancos estatales. Los prestamistas más pequeños o locales ya no son una opción después de que se ampliaran las sanciones.
La situación es crítica para la economía rusa, ya que las importaciones en rublos como porcentaje del PIB están disminuyendo notablemente después de recuperarse en 2023. Sin embargo, algunos exportadores han dicho que no han experimentado problemas al ejecutar pagos. La transacción denominada en yuanes de un importante exportador de energía desde China este mes se realizó sin problemas, aunque algunos bancos han dejado de trabajar con Rusia.
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