La relación entre los seres humanos y las palomas ha sido siempre muy estrecha, ya que estas aves han sido durante siglos compañeras fieles de los humanos en muchos hogares. Sin embargo, ¿sabías que las palomas pueden sentir celos? Esta pregunta puede parecer sorprendente, pero la verdad es que estos animales tan queridos pueden llegar a desarrollar un fuerte vínculo emocional con sus dueños, lo que puede llevar a comportamientos que pueden parecer celosos. En este artículo, descubrirás por qué es normal que las palomas no quieran compartir a tu mascota con nadie más, y cómo esto se relaciona con su naturaleza social y su capacidad para formar lazos afectivos.
Las palomas, más que solo aves: la historia de Vital Mezery y su paloma Pika
Las palomas, aunque no siempre se les considere como animales de compañía, son parte de muchos hogares españoles. Sin embargo, muchos amantes de estas aves buscan conocerlas y entenderlas mejor. Es el caso de Vital Mezery, quien rescató a una paloma llamada Pika y la introdujo en su casa. Desde entonces, no deja de aprender cosas nuevas sobre ellas: su comportamiento, su psicología, su alimentación y muchos otros aspectos.
Además, a través de su cuenta de Instagram, Mezery comparte su día a día con estas aves y divulga información para que podamos entenderlas mejor. En más de una ocasión, ha contado a través de sus vídeos el problema de celos que tiene entre Pika y su mujer debido a la improntación que la paloma tiene en él.
Los celos en palomas: una realidad
Mezery explica que los celos en palomas pueden darse tanto entre ellas como hacia otros animales, incluidos los seres humanos. En mi caso, yo soy el objeto de disputa entre Pika (nuestra paloma) y mi esposa, ya que Pika me considera su pareja y, en consecuencia, mi mujer para ellas es mi amante, relata.
Ella está mucho más tranquila cuando está conmigo a solas y, aunque a mi mujer la tolera, no tiene amistad con ella, añade. Si le acerca la mano o incluso la apoya cerca de Pika sobre la mesa, ella corre a morderla, dependiendo del estado de ánimo que tenga ese día.
Cómo identificar los celos en una paloma
Para identificar si una paloma tiene celos de algún miembro de nuestra familia, Mezery defiende que hay que fijarse en la expresión de su cara y en los gestos que hace. Oficialmente no tienen expresiones, pero en la realidad puedes observar matices y una expresión de celos es difícil de confundir, asegura.
Además, la paloma intentará más de una vez picar a la persona de la que está celosa y, si encima la regañas, tú también te llevas un picotazo, lo sé por experiencia, cuenta el divulgador. Si tienes en casa una paloma que está enamorada (improntada) es normal que no lo quiera compartir con otros y, por tanto, se puede presuponer que va a tener celos.
Cómo sobrellevar los celos de una paloma
En el caso de tener este problema con una paloma en casa, Mezery explica que lo primero que debemos hacer es respetar y entender que se trata de un vínculo afectivo como los que podemos tener los seres humanos. No creo que haya mucho que trabajar realmente, defiende.
Yo observo que hay un conflicto entre el instinto y la razón (que creo que los animales sí que tienen) y, de hecho, pasa lo mismo en la gente: la mente dice una cosa pero al corazón no se le puede ordenar qué sentir, opina.
Mezery ofrece algunos consejos para sobrellevar mejor esta situación en casa y evitar conflictos. En mi caso, como sé que Pika siente celos hacia mi esposa, evitamos cualquier contacto frente a ella, explica. Por ejemplo, evitamos compartir comida ya que las palomas con sus parejas hacen eso y yo, por razones obvias de salud con Pika, no puedo hacerlo, pero sí lo evito con mi mujer.
Incluso pasamos tiempo juntos fuera de la habitación donde se encuentra Pika. Aunque Mezery entiende que es complicado tener en cuenta estos pequeños detalles todo el tiempo, defiende que es una cuestión que depende del grado de amor y respeto que le tengas a tu paloma.
A mi me molesta mucho ver como algunas personas enfadan a sus palomas por diversión, son aves muy sensibles cuyas emociones merecen respeto, concluye.
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