En el escenario político ecuatoriano, Rafael Correa, expresidente de la República del Ecuador, y Guillermo Lasso, actual presidente del país, se encuentran inmersos en una disputa ridícula que ha generado gran conmoción en la opinión pública. La tensión entre ambos líderes políticos ha ido en aumento en las últimas semanas, lo que ha llevado a una espiral de agresiones verbales y acusaciones mutuas. Sin embargo, más allá de las palabras y los gestos, esta guerra de declaraciones solo parece servir para llorar a la llorería, perdiendo de vista los verdaderos problemas que aquejan al país.
Correa vs Noboa: La disputa entre expresidentes ecuatorianos explota en redes sociales
Las redes sociales están en llamas con el último rifirrafe entre el presidente de Ecuador, Daniel Noboa, y el expresidente Rafael Correa, sobre la decisión de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) y el asalto a la embajada de México en Quito.
Noboa ha reaccionado al fallo emitido este jueves por la CIJ con un mensaje dirigido a Correa en el que le manda a llorar a la llorería por haber pedido a la comunidad internacional presionar a su Gobierno tras el asalto a la embajada de México para detener a su exvicepresidente Jorge Glas.
En su cuenta de Instagram, Noboa escribió: A llorar a la llorería. Quien está en contra de la Justicia, está en contra del Ecuador. El presidente acompañó su mensaje con un vídeo en el que aparece un fragmento de una conferencia brindada por Correa en el Parlamento Europeo, en la que pide a la comunidad internacional presiones políticas y judiciales porque se enfrentan a la barbarie.
En el vídeo, después de las imágenes de Correa, aparece Noboa en su despacho, acompañado de asesores, y recibe aparentemente la resolución de la CIJ de manos de la ministra de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana, Gabriela Sommerfeld. Luego, Noboa hace gestos burlescos de llorar mientras mira a la cámara, y en el vídeo aparece la frase como cuando pides sanciones para tu país y no te sale.
A los pocos minutos, Correa respondió a Noboa, llamándolo aprendiz de Calígula. En su cuenta de Twitter, Correa escribió: ¿Qué bárbaro! Este aprendiz de Calígula no entiende absolutamente NADA. Lo peor es que no va a ser él, sino el país, el que pague su torpeza, soberbia e irresponsabilidad. En fin… #LosCorruptosSiempreFueronEllos.
La disputa entre Noboa y Correa se centra en la decisión de la CIJ, que rechazó las medidas cautelares solicitadas por el Gobierno de México para precautelar sus sedes diplomáticas y bienes tras haber roto relaciones con Ecuador luego de la invasión a su embajada en Quito, ocurrida el 5 de abril.
La CIJ rechazó la solicitud de México, ya que Ecuador se adelantó y anunció que había dado garantías por escrito de que cumpliría con su deber de respetar y proteger a su personal y sedes diplomáticas.
La situación se originó cuando Jorge Glas, exvicepresidente de Correa, ingresó a la embajada de México en Quito el 17 de diciembre de 2023 para solicitar asilo, al considerarse inocente de los cargos y acusaciones en su contra y víctima de persecución política y 'lawfare' (utilización del aparato judicial contra adversarios políticos).
Glas enfrenta cargos de peculado (malversación de fondos públicos) en las obras de reconstrucción de las provincias afectadas por el fuerte terremoto de 2016. También enfrenta condenas por corrupción (cohecho y asociación ilícita).
La situación entre Ecuador y México se ha complicado desde entonces, con acusaciones mutuas de haber transgredido convenios y normas internacionales. La disputa entre Noboa y Correa es solo el último capítulo de una larga historia de tensiones entre ambos países.
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