La administración del presidente Joe Biden ha anunciado la finalización de la exención de sanciones que permitía a algunas empresas seguir operando en el sector petrolero de Venezuela. Esta medida, que había sido implementada durante la gestión de Donald Trump, busca ejercer una mayor presión sobre el gobierno de Nicolás Maduro. Con esta decisión, Estados Unidos busca reforzar su posición en la crisis política y económica que atraviesa Venezuela, en un intento por impulsar un cambio democrático en el país sudamericano. La eliminación de estas exenciones representa un paso más en la estrategia de Washington para aislar al régimen venezolano y promover una transición hacia la democracia.
Estados Unidos pone fin a la exención de sanciones al petróleo venezolano por incumplimiento democrático
El Gobierno de Estados Unidos ha anunciado la finalización del alivio de las sanciones al sector petrolero de Venezuela, tras el incumplimiento democrático en el país latinoamericano. Esta decisión se produce luego de que no se renovara la licencia que permitía transacciones en el sector petrolífero y gasístico. La licencia venció en la medianoche del miércoles al jueves, con un plazo hasta el 31 de mayo para cerrar operaciones pendientes.
Maduro desafía sanciones de EE UU afirmando independencia económica y crecimiento del país
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, desafía las sanciones de Estados Unidos afirmando la independencia económica y el crecimiento del país. Maduro asegura que ninguna sanción podrá detener el esfuerzo de construir un nuevo modelo económico productivo. Destaca que la economía venezolana crecerá alrededor del 8 % este año, independientemente de las restricciones impuestas.
Tras un acuerdo entre el Gobierno venezolano y la oposición para garantizar elecciones transparentes, Estados Unidos había relajado sus sanciones, condicionando dicha medida al cumplimiento de compromisos por parte de Maduro. Sin embargo, Washington señala que no se han cumplido plenamente los compromisos acordados en Barbados, lo que ha llevado a la decisión de poner fin a la exención de sanciones.
Maduro, por su parte, ha planteado la instauración de la pena de muerte para castigar delitos de corrupción y traición, así como elevarla a nivel constitucional. Ante las críticas y presiones internacionales, el mandatario venezolano reafirma la independencia económica y el crecimiento del país, desafiando las medidas coercitivas impuestas desde el exterior.
La comunidad internacional insta a Venezuela a cumplir con los compromisos electorales y a liberar a los presos políticos. Mientras tanto, Maduro sostiene que Venezuela seguirá su rumbo de crecimiento y desarrollo, sin depender de injerencias externas en su proceso económico y político.
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