El pasado lunes, la ciudad de Madrid vivió una situación caótica en su red de transporte público. Una avería en el sistema de señalización de Cercanías Madrid provocó la paralización de la circulación de trenes en varias líneas, dejando a miles de personas varadas en las estaciones. Sin embargo, algunos pasajeros decididos optaron por tomar medidas drásticas para llegar a su destino. Un grupo de afectados decidió andar por las vías hasta la estación de Atocha, una decisión que, según ellos, no repetirían por nada del mundo.
Avería en Cercanías Madrid: Pasajeros obligados a caminar por las vías para llegar a Atocha
Una avería en la señalización en la entrada de la estación de Atocha ha provocado el caos en las líneas C-2, C-7 y C-8 de Cercanías de Madrid este lunes por la mañana en plena hora punta.
Los pasajeros de dos trenes que llevaban parados cerca de una hora a la altura de la calle Téllez activaron la apertura de puertas de emergencia y terminaron a pie, caminando por las vías, los últimos metros de su trayecto hasta Atocha.
La respuesta de los pasajeros
La gente ha incluso atravesado las vías y ha recibido ayuda por parte del personal de seguridad para subir rápido a los andenes y evitar un desgraciado posible arrollamiento.
Según fuentes de Renfe, esta incidencia no ha ocasionado daños físicos a ningún pasajero, pero sí retrasos que poco a poco se van solventando.
Testimonios de los afectados
Juan Francisco, trabajador de 21 años y residente en Vallecas, ha sido una de las personas que ha sufrido la inaudita escena de este lunes y así lo ha denunciado con varios vídeos subidos a la red social X. Es una vergüenza. Esto es un día más en Renfe, lo habitual, lamenta.
El joven ha explicado que el tramo caminando ha sido de unos cinco minutos y que la gente estaba nerviosa y agobiada. Una niña casi se desmaya por el calor y otra persona ha sufrido vómitos. Cuando han abierto las puertas, la gente mayor ha tenido que ser ayudada para bajar a las vías.
Otra de las personas que ha sufrido la avería de esta mañana es Marta Carrasco, estudiante de Marketing y Publicidad en Pozuelo. Un día más, ha llegado tarde. Aunque lo de esta mañana ha sido lo nunca visto, dice mientras llega a Pozuelo a las 11.00 horas.
Su relato describe una agobiante escena en la que las ventanas de su vagón, lleno de personas como sardinas en lata, han empezado a condensar por el calor que hacía dentro. Todos íbamos sudando, ha sido muy agobiante, dos personas se han desmayado. No decían nada por megafonía y, al cabo de 50 minutos, la gente ha comenzado a golpear las puertas y, al final, han tirado de la palanca de emergencia para abrir las puertas y la gente ha comenzado a salir para llegar andando por las vías.
Consecuencias de la avería
La presencia de personas en las vías ha obligado a cortar la circulación entre las 9 y las 9.17 horas en la entrada a Atocha para garantizar la seguridad, han indicado desde el gestor ferroviario.
Como consecuencia de esta incidencia, se han registrado retrasos medios de 25 minutos en las líneas C-2 (Guadalajara-Chamartín), C-7 (Alcalá de Henares-Príncipe Pío) y C-8 (Guadalajara-Cercedilla).
La investigación sobre las circunstancias de lo sucedido sigue en curso.
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