Copérnico predice un verano menos caluroso después del abrasador 2023 que causó hasta diez días de estrés térmico extremo en España
Según el último informe del sistema de monitoreo climático Copérnico, se espera que el próximo verano en España sea menos intenso en términos de altas temperaturas, tras el impacto del verano abrasador del 2023. Este último período estival fue caracterizado por hasta diez días de estrés térmico extremo en diversas regiones del país. La predicción de Copérnico brinda un alivio anticipado a la población, que experimentó condiciones climáticas extremas y preocupantes el año anterior. Se espera que esta disminución en la intensidad del calor permita a los habitantes de España disfrutar de una temporada estival más llevadera y menos desafiante desde el punto de vista climático.
Europa afronta el segundo año más caluroso con récord de estrés térmico
En 2023, Europa continuó evidenciando los efectos del cambio climático con el segundo año más caluroso desde que hay registros, situándose solo por detrás de 2020. Este año se caracterizó por la presencia de situaciones más extremas, entre ellas el estrés térmico, relacionado directamente con la salud humana.
Copernicus pronostica un verano menos caluroso tras el abrasador
Según Copernicus, se prevé que el verano próximo no sea tan caluroso, a pesar de que los registros del primer trimestre del año muestran un aumento en las temperaturas. Expertos afirman que los meses de junio, julio y agosto no superarán la media de las temperaturas en Europa.
España registra hasta diez días de estrés térmico extremo
En 2023, España y otras zonas del sur de Europa enfrentaron hasta diez días de estrés térmico extremo, relacionado con un incremento del 20% en la mortalidad en la región en las últimas dos décadas. Este fenómeno guarda estrecha relación con los efectos del cambio climático en la salud humana.
Copernicus advierte sobre efectos del cambio climático en la salud humana
El informe de Copernicus sobre 2023 destaca cómo el calor afecta la salud humana, especialmente a través del concepto de estrés térmico. Este fenómeno, que puede agravar enfermedades y aumentar el riesgo de padecer otras, afecta principalmente a poblaciones vulnerables como personas mayores y niños, siendo España y el sur de Europa zonas especialmente afectadas.
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