Descubre los misterios de las cuevas que durante 8.000 años fueron hogar de seres humanos y ahora se puede visitar desde España en un día

Imagina un lugar donde el tiempo se ha detenido, donde los secretos del pasado esperan ser revelados. Cuevas milenarias, testigos silenciosos de la historia de la humanidad, que durante 8.000 años fueron el hogar de nuestros ancestros. Ahora, gracias a una innovadora opción de viaje, es posible descubrir los misterios de estas cuevas desde España en solo un día. Prepárate para un viaje en el tiempo, donde la aventura y la historia se unen para llevarnos a un mundo desconocido. ¡ Únete a esta emocionante experiencia y descubre los secretos que estas cuevas han guardado durante siglos!

Index

Descubre el misterio de las cuevas francesas, hogar de seres humanos hace 8.000 años

En el sur de Francia, a unas tres horas de distancia en coche con la frontera con España, se encuentra la cueva de Saint-Marcel, uno de los grandes atractivos turísticos de la zona, rodeada de un halo de misterio.

Esta cueva, de más de 64 kilómetros de longitud, estuvo ocupada por los humanos hace más de 8.000 años. Sin embargo, lo que es aún más sorprendente es cómo lograron los humanos habitar este espacio sin iluminación y sorteando los peligros de la caverna, como los pozos profundos de la misma.

Un misterio que sigue sin resolver

Un misterio que sigue sin resolver

Un estudio reciente publicado por el Journal of Archaeological Method and Theory revela que hace 8.000 años hubo gran actividad humana en las cuevas, lo que plantea la cuestión del conocimiento de las cuevas en ese período prehistórico, la capacidad (de los humanos) para explorar y cruzar pozos, y su dominio de la iluminación.

El estudio saca a la luz el compromiso de las comunidades humanas del pasado con el entorno subterráneo profundo, al cual sólo se puede acceder atravesando obstáculos (pozos) que, hoy en día, se consideran difíciles de cruzar.

El descubrimiento de la cueva

En octubre de 1836, un cazador de Aiguèze, en busca de un conejo herido, siguió sus huellas y descubrió la cueva. Luego, en julio de 1838, el cazador regresó al lugar con amigos con el objetivo de explorar el agujero, esta vez equipado con antorchas.

Al regresar de su exploración de la cavidad, describieron el tamaño de la misma y la variedad de concreciones. Años después, Édouard-Alfred Martel, considerado el padre de la espeleología moderna, dedicó un capítulo entero a la cueva en su libro Les Abîmes, publicado en 1894, que contenía una descripción completa y detallada de las partes entonces conocidas de la cueva.

La cueva de Saint-Marcel sigue siendo un misterio que atrae a turistas y científicos por igual, y su descubrimiento nos recuerda la capacidad y la determinación de nuestros antepasados para explorar y habitar entornos inhóspitos.

Lucía García

Hola, soy Lucía, un apasionado escritor y experto en actualidad nacional e internacional en el periódico independiente El Noticiero. Mi dedicación por la objetividad y la rigurosidad en mis artículos me permite ofrecer a nuestros lectores las últimas novedades de manera imparcial y detallada. Mi compromiso es informar con veracidad y transparencia, para que nuestros lectores estén siempre bien informados. ¡Descubre conmigo las historias más relevantes del momento en El Noticiero!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Subir