¿Dónde están ubicados los radares de tramo más extensos de España en la A-8?

¿Dónde están ubicados los radares de tramo más extensos de España en la A-8?

Una noticia que ha generado gran interés en la comunidad automovilística es la referente a la localización de los radares de tramo más extensos de España en la autopista A-8. Este dato ha despertado la curiosidad de conductores y autoridades viales por igual, ya que la ubicación estratégica de estos dispositivos de control de velocidad puede tener un impacto significativo en la seguridad vial y el cumplimiento de las normativas de tráfico. Conocer dónde se encuentran situados estos radares no solo es relevante para los conductores que transitan por esta vía, sino que también representa un punto de interés en el ámbito de la vigilancia y regulación del tráfico en España.

Descubre los radares de tramo más extensos de España en la A-8

La Dirección General de Tráfico (DGT) tiene previsto instalar nuevos radares de tramo en la Autovía del Cantábrico durante este 2024, con el objetivo de controlar la velocidad a lo largo de varios kilómetros. Estos dispositivos, a diferencia de los radares móviles y fijos, permiten monitorizar la velocidad en una zona extensa de la vía.

En la actualidad, la Autovía A-8, conocida como la vía de alta capacidad del Cantábrico, alberga los radares de tramo más largos de España y se espera la colocación de más cinemómetros de este tipo en la zona. Entre los dispositivos ya existentes en la A-8 se encuentra uno de 1,1 km entre Ribadeo y Figueras, y otro de 5,6 km entre Mondoñedo y O Fiouco, ambos limitados a 100 km/h.

Además de los radares de tramo, la A-8 cuenta con más de 10 radares fijos y la presencia de radares móviles de la Guardia Civil. Durante este año se tiene prevista la instalación de nuevos dispositivos de tramo en esta autovía.

La DGT instalará nuevos radares de tramo en la Autovía del Cantábrico

Uno de los nuevos radares de tramo que se instalará en la A-8 se ubicará entre la salida de Castro Urdiales y el viaducto de Ontón, abarcando un tramo de aproximadamente 6 kilómetros en la zona conocida como Saltacaballo. Este dispositivo sustituirá a un radar fijo que limitaba la velocidad a 80 km/h, estableciendo ahora un límite de 100 km/h. Está previsto que entre en funcionamiento antes del verano, coincidiendo con un aumento de desplazamientos en la zona.

Los radares de tramo son sistemas de cámaras que registran de forma continua la matrícula de los vehículos al entrar y salir del tramo controlado. Un ordenador analiza las matrículas, calcula la velocidad media y, en caso de superar el límite establecido, se procede a la sanción del vehículo infractor. Estos dispositivos se instalan en vías de alta capacidad y carreteras convencionales, pudiendo abarcar varios kilómetros de longitud.