El plazo de duración del subsidio para personas mayores de 52 años: ¿Cuánto tiempo se mantiene?

El plazo de duración del subsidio para personas mayores de 52 años: ¿Cuánto tiempo se mantiene?

En el marco de la política de apoyo a la tercera edad, uno de los aspectos más importantes es la duración del subsidio que se otorga a las personas mayores de 52 años. Esta ayuda económica es fundamental para garantizar la calidad de vida de los adultos mayores, permitiéndoles cubrir sus necesidades básicas y disfrutar de una jubilación digna. Sin embargo, surge la pregunta: ¿cuánto tiempo se mantiene este apoyo económico? En este sentido, es fundamental comprender los plazos de duración establecidos por la ley y las condiciones necesarias para mantener este beneficio.

El plazo de duración del subsidio para personas mayores de 52 años: ¿Cuánto tiempo se mantiene?

Los mayores de 52 años tienen derecho a un subsidio por desempleo en caso de haber agotado la prestación contributiva, según establece el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE). Para optar a esta ayuda es necesario estar inscrito como demandante de empleo y suscribir el compromiso de actividad que obliga a buscar activamente empleo.

Esta ayuda se cobra hasta que el beneficiario encuentre un empleo o hasta que este llegue a la edad ordinaria de jubilación que le corresponda, según recoge el portal Noticias Trabajo. En su web, el SEPE establece que el subsidio puede cobrarse hasta que alcances la edad ordinaria que se exija para tener derecho a la pensión contributiva de jubilación en el sistema de la Seguridad Social.

En cualquier caso, aunque no se especifica la edad, en realidad sí que hay una edad límite para cobrar la ayuda. En concreto, dos edades límite que marcan la edad de jubilación en España en la actualidad: 66 años y 6 meses si no se tienen al menos 38 años cotizados, y 65 años si se tienen más de 38 años cotizados.

Estas son, en la práctica, las edades límite para seguir percibiendo el subsidio para mayores de 52 años. Para optar a esta ayuda, hay que estar en situación legal de desempleo, haber agotado el paro o, si no se tiene derecho a este, haber cotizado entre 90 y 359 días.

También deben contar con al menos 15 años cotizados, de los cuales al menos dos deben estar dentro de los últimos quince años. Asimismo, se deben tener cotizados seis años por desempleo. Por último, no se pueden tener ingresos que superen el 75% del salario mínimo interprofesional (SMI), excluida la parte proporcional de dos pagas extraordinarias. Esta cantidad, con la última subida del SMI, son 850,5 euros mensuales.