El precio del petróleo sube en picado por el conflicto en Oriente Medio, reviviendo la preocupación sobre la inflación

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El precio del petróleo sube en picado por el conflicto en Oriente Medio, reviviendo la preocupación sobre la inflación

El conflicto en Oriente Medio ha generado un aumento exponencial en el precio del petróleo, lo que ha generado una gran preocupación en los mercados financieros y entre los expertos económicos. La tensión geopolítica en la región ha llevado a una disminución en la producción de petróleo, lo que ha provocado un aumento en la demanda y, consecuentemente, un incremento en los precios. Esto ha despertado la inquietud sobre el posible impacto en la inflación, ya que el aumento en el costo del petróleo puede afectar la economía global. En este contexto, se espera que los gobiernos y las empresas tomen medidas para mitigar los efectos de esta situación y evitar un posible deterioro económico.

Petrolio en alza: conflicto en Oriente Medio reviviene el temor a la inflación

La intensificación del conflicto bélico en Oriente Medio tras los recientes ataques de Irán a Israel y del estado hebreo a la zona sur del Líbano han hecho crecer la tensión en los mercados. Los inversores observan con incertidumbre la subida del precio del crudo durante la última semana, que ha batido récords en dos años y ha traído de vuelta el temor a un repunte de la inflación, poniendo en duda el desarrollo del ciclo de bajadas de interés que se esperaba para los próximos meses.

Pese a que los expertos matizan que el encarecimiento de este inicio de octubre se ha visto compensado por las fuertes bajadas que se dieron en el mes anterior y el precio del barril continúa lejos de los máximos registrados este año, también recuerdan que la evolución de los ataques en Oriente Medio podría agravar la situación.

Escenarios de riesgo

Escenarios de riesgo

En concreto, los escenarios de un posible ataque de Israel a las instalaciones petroleras iraníes o de un bloqueo por parte de Teherán en el estrecho de Ormuz (por el que transita un 20% del petróleo que se suministra a todo el mundo) preocupan a los inversores. De hecho, los precios del crudo han sido los primeros en reaccionar a las últimas señales de escalada del conflicto.

El despegue del crudo, que ha llegado a tocar los 79 dólares por barril -su nivel más alto desde finales de agosto- se inició el martes, después de que EEUU alertara de un inminente ataque de Irán contra Israel. Los precios se moderaron el miércoles, tras mantener la OPEP+ su plan para reactivar la producción a partir de diciembre, y volvieron a repuntar el jueves ante el riesgo de que Israel ataque instalaciones petroleras iraníes.

Temor a un ataque a las instalaciones petroleras

El detonante fue un comentario del presidente de EEUU, Joe Biden, quien dijo, antes de subir al helicóptero presidencial, que esa posibilidad está sobre la mesa. Los analistas coinciden en que los factores que determinarán los precios del crudo a partir de ahora son la situación en Oriente Próximo; la evolución de la demanda, ahora estancada, y la postura que la OPEP+ adopte sobre los niveles de producción.

Ignacio Cantos, director de Inversiones de ATL Capital, recalca que, de momento, las subidas de esta semana se limitan a compensar las caídas registradas en septiembre. Vemos una vuelta a la zona media de los últimos años, explica. Por ahora, los precios del petróleo se mantienen muy por debajo de su máximo reciente, recuerdan Claudio Irigoyen y Antonio Gabriel, de Bank of América, en un informe reciente.

El precio del Brent, el crudo de referencia en Europa, superó los 92 dólares por barril en abril. Sin embargo, Irigoyen y Gabriel precisan que una mayor escalada podría impulsar la inflación general y las expectativas de inflación. Según Thomas Hempell, de Generali Investments, la principal señal a vigilar a corto plazo es el riesgo de interrupción del suministro de petróleo.

Riesgos para la economía

Los ataques de represalia de Israel pueden afectar a los centros de producción de petróleo iraníes; los hutíes de Yemen podrían intensificar los ataques en el Mar Rojo, lo que perturbaría aún más el comercio mundial, y, en caso extremo, Irán podría intentar cerrar de facto el estrecho de Ormuz, explica. En una situación como esa, añade, la subida de los precios de la energía podría suscitar nuevas preocupaciones inflacionistas y frenar la normalización de la política monetaria.

No obstante, Hempell precisa que la atonía de la economía china y la nueva ralentización de la producción industrial mundial han lastrado los precios de la energía durante el verano. A este factor se sumaría, el reciente giro estratégico de Arabia Saudí, que parece haber abandonado su objetivo de elevar el precio del crudo hasta los cien dólares y apuesta ahora por aumentar la producción.

Según Manuel Pinto, analista de mercados, resulta difícil predecir la evolución de los precios del crudo en un escenario en el que, ahora mismo, todo depende de la respuesta de Israel al ataque iraní. Sin embargo, considera que, a largo plazo, la espiral bajista del petróleo podría continuar hasta los 60 dólares por barril por el estancamiento del consumo y el aumento previsto de la producción.

Sara Ortega

Soy Sara, redactora de la página web El Noticiero. En este periódico independiente de actualidad nacional e internacional, me dedico a investigar y redactar las últimas novedades con la más rigurosa objetividad. Mi pasión por el periodismo me impulsa a ofrecer a nuestros lectores información veraz y completa, manteniendo siempre la ética y el compromiso con la verdad. ¡Es un honor para mí formar parte de este equipo y contribuir a mantener a nuestros lectores informados de manera imparcial y profesional!

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