La comunidad científica recibe con asombro la noticia de que se ha descubierto un tipo de linfocito que desempeña un papel crucial en alertar al sistema inmunitario sobre el cáncer de mama. Este hallazgo revolucionario podría cambiar radicalmente el enfoque en el tratamiento de esta enfermedad que afecta a millones de mujeres en todo el mundo. Los investigadores han identificado que estos linfocitos, al detectar la presencia de células cancerosas en el tejido mamario, activan una respuesta inmunológica específica que contribuye a combatir el crecimiento tumoral. Esta revelación abre nuevas puertas en la lucha contra el cáncer de mama y brinda esperanza a pacientes y profesionales de la salud por igual.
Descubren linfocitos NK que potencian respuesta inmune contra cáncer de mama
Un estudio liderado por investigadoras del Hospital del Mar de Barcelona ha revelado un importante hallazgo en la lucha contra el cáncer de mama. Se ha descubierto un tipo de linfocito, conocido como Natural Killers (NK), que al interactuar con los anticuerpos utilizados en el tratamiento contra el cáncer de mama HER2 positivo, activa y potencia la respuesta inmunitaria del organismo.
Investigaciones previas habían confirmado la relevancia de los linfocitos NK en la respuesta al tratamiento con anticuerpos antiHER2 en casos de cáncer de mama agresivo. Aunque inicialmente se creía que su presencia era baja en comparación con otras células del sistema inmunitario, se sospechaba que tenían un papel regulador en la respuesta del cuerpo ante el cáncer.
Este nuevo estudio, publicado en la revista 'Journal of Experimental & Clinical Cancer Research', ha demostrado que los linfocitos NK, al entrar en contacto con los anticuerpos antiHER2, segregan proteínas que modifican el entorno tumoral, favoreciendo la llegada de otras células inmunitarias y fortaleciendo así la acción del tratamiento contra el cáncer.
La doctora Aura Muntasell, una de las principales investigadoras del estudio, señaló que los linfocitos NK no solo tienen una función antitumoral directa al eliminar células cancerosas, sino que también desencadenan una señal que facilita la llegada de otras células inmunitarias al tumor, contribuyendo a su eliminación.
Gracias a este descubrimiento, se ha confirmado que las pacientes con mayor presencia de linfocitos NK en el entorno tumoral responden mejor al tratamiento. Esto abre la posibilidad de utilizar las proteínas segregadas por los NK como marcadores de respuesta a los anticuerpos antiHER2 para mejorar la eficacia del tratamiento en pacientes con cáncer de mama HER2 positivo.
Los investigadores consideran que estas conclusiones pueden ser extrapolables a otros tipos de tumores, ya que evidencian la capacidad de los linfocitos NK para modificar el entorno tumoral, lo cual podría aplicarse en diferentes contextos oncológicos.
El estudio contó con la participación de la doctoranda Sara Santana y diversos servicios médicos especializados, como Oncología del Hospital del Mar, el Hospital Clínico de València, el Hospital Universitario Virgen de Victoria de Málaga, servicios de Anatomía Patológica del Hospital del Mar, la Fundación Jiménez Díaz y el CIBERONC.
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