En una noticia que ha conmovido al mundo, se relata la transformación sorprendente de un niño que en su momento fue considerado el más obeso del mundo. Tras un arduo proceso de dedicación y esfuerzo, este joven ha logrado perder más de 100 kilos, revelando una nueva imagen que ha impactado a todos. Su historia inspiradora es un ejemplo de superación y perseverancia, demostrando que con determinación y apoyo es posible alcanzar metas aparentemente imposibles. Ahora, su nueva apariencia es motivo de asombro y admiración, mostrando el poder de la voluntad y el cambio positivo en la vida de las personas.
El increíble cambio de Arya Permana, de niño más obeso del mundo a inspiración de salud
En un sorprendente giro de los acontecimientos, Arya Permana, quien alguna vez fue considerado el niño más obeso del mundo, ha transformado radicalmente su vida y se ha convertido en un verdadero ejemplo de superación y salud a sus 18 años.
En su etapa más crítica, con tan solo 10 años, Arya llegó a alcanzar la impactante cifra de 192 kilogramos, poniendo en serio riesgo su bienestar y su futuro. Sin embargo, tras años de arduo tratamiento, el joven ha logrado dejar atrás aquel dramático capítulo de su vida, aunque no sin consecuencias.
Según relatan sus padres, el descontrolado apetito de Arya comenzó a manifestarse en 2014, cuando apenas tenía ocho años de edad. Su salud se deterioraba a pasos agigantados, al punto de no poder valerse por sí mismo para caminar o mantenerse de pie durante más de unos minutos. La situación era tan grave que ni siquiera podía alimentarse por sí solo, dependiendo por completo de la ayuda de sus seres queridos.
La familia tuvo que adaptarse a las necesidades especiales del joven, llegando al extremo de construir una piscina al aire libre exclusivamente para que pudiera asearse, dado que ya no cabía en la ducha convencional de la vivienda. Sin embargo, la verdadera transformación llegó de la mano del preparador físico Ade Rai, quien implementó un riguroso plan de ejercicio, una nueva dieta y una cirugía bariátrica para controlar el tamaño de su estómago y frenar su voraz apetito.
Hoy en día, Arya ha logrado reducir su peso a alrededor de 87 kg, menos de la mitad de lo que llegó a pesar en su peor momento de obesidad. Su padre, Ade Somantri, destaca que el tratamiento médico, la alimentación balanceada y la disciplina en el ejercicio han sido clave en la transformación de su hijo.
El joven, aficionado al bádminton, ha sido sometido a múltiples cirugías para eliminar el exceso de piel tras perder más de la mitad de su peso. Su entrenador, Ade Rai, lo describe como un símbolo de esperanza y destaca que su historia ha inspirado a muchas personas a creer en la posibilidad de alcanzar una vida más saludable.
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