Los funcionarios de prisiones catalanas dicen basta: Tras el trágico suceso que ha conmocionado a la comunidad carcelaria, expresan su firme rechazo ante la situación actual. El asesinato de Nuria ha sido el detonante que ha revelado las consecuencias de una política nefasta que ha desembocado en un desenlace lamentable. Este crimen representa el punto de inflexión que evidencia las carencias y peligros que enfrentan diariamente los trabajadores de las cárceles en Cataluña. El grito de indignación resuena en un sector que reclama medidas urgentes y un cambio profundo en las políticas penitenciarias. Es necesario poner fin a esta situación insostenible que pone en peligro tanto a los profesionales como a los internos, en un llamado desesperado por la seguridad y la justicia en el sistema penitenciario.
Funcionarios de prisiones catalanas exigen más seguridad y la dimisión de autoridades
Los funcionarios de prisiones catalanas se han reunido en una rueda de prensa en el Col·legi de Periodistes de Catalunya para expresar su indignación y preocupación por la falta de seguridad en los centros penitenciarios. Seis días después del trágico asesinato de Nuria, una cocinera de la cárcel de Mas d’Enric (Tarragona), a manos de un preso, han alzado su voz exigiendo medidas urgentes.
En este sentido, han solicitado la dimisión de la consellera de Justicia, Gemma Ubasart, y el secretario de Medidas Penales, Amand Calderó, a quienes consideran responsables de la situación. Los funcionarios denuncian las políticas nefastas que, según ellos, ponen en riesgo sus vidas y la integridad de todo el personal que labora en las prisiones catalanas.
Una de las portavoces del colectivo de trabajadores, Sandra, quien también es jurista y criminóloga en la prisión de Lledoners, ha manifestado que el asesinato de Nuria es el resultado de una política irresponsable. Acompañada por Raquel, Francina y Gabi, funcionarios de vigilancia en diversos centros penitenciarios catalanes, han dejado claro que necesitan líderes que comprendan la realidad de su trabajo, personas que hayan pisado los patios y módulos de las prisiones.
Francina, funcionaria de vigilancia en el centro donde ocurrió el trágico suceso, ha afirmado que las protestas continuarán hasta que las autoridades correspondientes dimitan. De lo contrario, han instado al presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, a cesarlos de sus cargos.
Trabajadores de prisiones catalanas denuncian condiciones laborales peligrosas
La principal queja de los funcionarios de prisiones se centra en la falta de seguridad y de profesionales en los centros penitenciarios. Destacan la necesidad de vivir en un entorno ordenado para garantizar la seguridad de todos los implicados en el sistema penitenciario.
Por ejemplo, Raquel, funcionaria en la cárcel de Quatre Camins, ha compartido la precaria situación en la que trabaja, a menudo sola y con recursos insuficientes. La falta de personal y de medios adecuados pone en riesgo su integridad, así como la de sus compañeros.
Francina ha señalado que las políticas actuales han descuidado la ley orgánica y general penitenciaria, lo que ha llevado a la implementación de protocolos y circulares restrictivas que limitan su capacidad de actuación. Los funcionarios desean trabajar en condiciones seguras que no comprometan sus vidas ni su bienestar.
Deja una respuesta