En un contexto económico cada vez más dinámico, la producción industrial ha experimentado un aumento significativo en el mes de mayo, alcanzando niveles máximos en 26 meses. Esta tendencia ascendente se debe en gran parte a la demanada creciente de bienes y servicios, lo que ha llevado a las empresas a incrementar su producción para satisfacer la creciente demanda del mercado. Este aumento en la producción industrial es un indicador positivo para la economía, ya que se traduce en un aumento de la actividad económica y la generación de empleo. En este sentido, la tendencia actual sugiere que la economía está en un camino de crecimiento sostenido.
Aumento de la producción y demanda impulsan tasas industriales a niveles máximos en meses
El crecimiento de la actividad del sector manufacturero de España se aceleró en mayo, alcanzando máximos de 26 meses, según el índice de gestores de compra (PMI), que subió a 54 puntos desde los 52,2 del mes anterior.
El aumento de la producción y de los nuevos pedidos fue el motor principal detrás de esta expansión, ya que ambos indicadores aceleraron su crecimiento hasta máximos de 27 y 30 meses respectivamente.
Producción y nuevos pedidos impulsan el crecimiento
Los fabricantes españoles aumentaron la producción mediante una expansión tanto de la actividad de compra como de la dotación del empleo, que aumentó por cuarto mes consecutivo y marcó el nivel más alto desde febrero de 2022.
El aumento de la producción y de los nuevos pedidos fue posible gracias a la mayor demanda y a la mejora de la eficiencia en la cadena de suministro. Esto permitió a las empresas españolas aumentar su producción y responder a la creciente demanda.
Presiones inflacionistas en aumento
Sin embargo, el aumento de la producción y de los nuevos pedidos también trajo consigo un aumento de las presiones inflacionistas. La inflación de los costes de los insumos aumentó a su nivel más alto en 15 meses, lo que llevó a las empresas a subir sus precios cobrados.
Según Jonas Feldhusen, economista junior de Hamburg Commercial Bank, la presión de los precios en el sector manufacturero español ha resurgido drásticamente en mayo. A pesar de que los costes de los insumos fueron más altos, las empresas pudieron repercutir estos a los consumidores finales, lo que provocó el primer aumento de los precios cobrados en catorce meses.
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