En el escenario político español, Alejandro Fernández se ha erigido como una figura polémica y inconformista, cuyas declaraciones y acciones han generado un gran revuelo en el debate político. Como candidato del Partido Popular (PP), Fernández ha demostrado no tener miedo a romper las reglas y desafiar la norma, lo que lo ha llevado a ser considerado como el candidato más inconformista de su partido. En este sentido, su participación en el debate político ha generado un gran interés y expectación, ya que nadie sabe qué puede esperar de este político no convencional.
El rebelde del PP: la historia de Alejandro Fernández, el candidato que rompe las reglas
Desde crío, Alejandro Fernández estaba acostumbrado a los debates fervientes que se sucedían en la cocina de su casa. Con un padre de derechas y una madre comunista, Alejandro mamó suficiente debate. Así fue como el tarraconense se metió de lleno en la política nada más cumplir la mayoría de edad.
En junio de 1994, con 18 años recién cumplidos, se afilió al PP. Siempre tuvo claro que ese era su partido, pese a la dificultad que conlleva en Cataluña. Ahora, a sus 47 años, repite como candidato del PP a la Generalitat y se afianza como el más rebelde de los barones de Alberto Núñez Feijóo, a quien ganó la batalla.
La pasión por la política
Hizo de su pasión su propia profesión. Así, con su bagaje en Nuevas Generaciones del PP se licenció en Ciencias Políticas y de la Administración por la Universidad Autónoma de Barcelona y completó su formación con un máster en Comunicación Política.
En 2003 logró su primera oportunidad en Tarragona. Gracias a Francesc Ricomà, al que considera su padrino político, fue elegido concejal del Ayuntamiento de Tarragona y teniente de alcalde de Promoción Económica. Renovó este acta en 2007, 2011 y 2015 y mientras lo compaginaba impartiendo clases de Ciencia Política de la Universidad Rovira i Virgili de Tarragona.
La trayectoria política
Aquellos fueron los mejores y los peores de su carrera política. Recuerda con verdadera ilusión la victoria de José María Aznar en 1996. Claro que cuatro años después experimentaría uno de sus episodios más trágicos, cuando la banda terrorista ETA asesinó a sus compañeros Paco Cano y José Luis Ruiz Casado.
En los siguientes años fue ostentando diferentes cargos en el PP de Tarragona hasta que Pablo Casado le eligió en 2021 como su candidato a la Generalitat. El PP a su cabeza se llevó su mayor batacazo de su historia en Cataluña.
La lucha por el poder
Pese a ello, Alejandro se ha mantenido fuerte en su puesto desde entonces. La llegada de Feijóo a la dirección nacional amenazaba con un relevo, como ocurrió por ejemplo en País Vasco. No obstante, por evitar un posible conflicto interno, Génova trató de evitar la celebración de su congreso en Cataluña en el que tenía previsto elegir a un nuevo líder.
Tras semanas de silencio por parte de Génova, Feijóo le reconfirmó como candidato. Tras aquello, ambos presumen de compartir el mismo proyecto para Cataluña. Por ejemplo, lo que tiene que ver con el bilingüismo cordial, el mismo que impulsó Feijóo cuando era presidente en Galicia y el mismo que practica Fernández en casa con su propia hija con la que se comunica en ambos idiomas.
Se dice apasionado del cine, de la música y de la lectura, además de las travesías de montaña. Pero sobre todo siente la política como un deber; una segunda oportunidad que se toma con muchísima ilusión y confianza.
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