El hallazgo del cuerpo de un regatista frente a la costa gallega ha conmocionado a la comunidad marítima. El navegante, quien se encontraba en una travesía desde Francia con destino al Caribe, ha sido encontrado sin vida en aguas gallegas. Este trágico suceso pone de manifiesto los peligros y desafíos a los que se enfrentan los viajeros en alta mar, donde factores como las condiciones climáticas y la navegación pueden jugar un papel determinante en el desenlace de una travesía. Las autoridades continúan investigando las circunstancias que rodearon la muerte de este aventurero del mar, mientras la comunidad náutica lamenta la pérdida de uno de sus miembros.
Salvamento Marítimo ha localizado este miércoles el cuerpo sin vida del regatista francés Philippe Benoiton, de 63 años, que había desaparecido mientras navegaba frente a las costas gallegas en dirección a la isla francesa caribeña de Martinica. El velero del regatista fue encontrado a la deriva frente a la Costa da Morte.
Alrededor de las ocho de la mañana, la organización de la prueba Cap-Martinique en la que participaba Benoiton informó que su velero JPK 9.60 navegaba de forma lenta y errante, sin posibilidad de establecer contacto. Más tarde, sobre las nueve y veinte de la mañana, los servicios de Salvamento Marítimo hallaron la embarcación vacía, con el motor encendido y una pieza del timón rota, la cual fue remolcada hasta la localidad coruñesa de Cee, en la Costa da Morte.
El helicóptero de Gardacostas de Galicia localizó el cuerpo al suroeste del Cabo Fisterra. El único tripulante del velero era el fallecido Philippe Benoiton. La principal hipótesis de Salvamento Marítimo apunta a que podría haber sufrido una caída accidental, pues durante la noche se registraron vientos del nordeste y estaba activa la alerta amarilla por condiciones adversas.
Una vez recuperado del agua, el cuerpo del regatista ha sido trasladado al aeropuerto de Vigo.
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