La Junta de Andalucía exige respeto a Puente y que le dé a la región lo que le corresponde tras la controversia por el AVE entre Sevilla y Huelva. La polémica desatada por el proyecto del AVE que conectaría Sevilla con Huelva ha generado tensiones entre las autoridades locales. Ante esta situación, la Junta de Andalucía ha demandado respeto al alcalde de Sevilla, Juan Espadas, instándole a que cumpla con lo acordado y atribuya a la región lo que legítimamente le corresponde en este proyecto de infraestructura crucial para el desarrollo de la comunidad. Las diferencias de opinión entre las partes involucradas han generado incertidumbre en torno a la viabilidad y ejecución del proyecto, poniendo en riesgo los beneficios que el AVE podría aportar a la región.
La Junta de Andalucía defiende inversiones justas para la región y exige respeto a Puente
El nuevo conflicto entre la Junta de Andalucía y el Gobierno central, derivado de la renuncia al AVE entre Sevilla y Huelva, continúa en aumento. El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, desafió al presidente andaluz, Juanma Moreno, instándole a decidir si prefiere destinar fondos para completar la SE-40 en Sevilla o para iniciar una nueva línea de alta velocidad.
En este sentido, el consejero de la Presidencia, Antonio Sanz, ha criticado las declaraciones de Puente, señalando que no es aceptable que se pida a Andalucía conformarse con una sola obra, a pesar del notable déficit de infraestructuras que sufre la región. Sanz afirmó que si esas mismas declaraciones se hubieran hecho en relación a Cataluña, el ministro ya no estaría en su cargo.
Los sindicatos y usuarios del tren en Andalucía han denunciado el estado nefasto de este medio de transporte en la región, con incidencias diarias debido a la falta de inversiones.
Sanz ha reprochado a Puente su falta de respeto hacia Andalucía al tomar decisiones sin consultar a la Junta, y al instar a conformarse con una sola obra, exigiendo renunciar a otras. Según el consejero, esta actitud no es adecuada para tratar a los andaluces, y ha instado al Gobierno a otorgar a la comunidad lo que le corresponde.
El ministro, según Sanz, debería decidir sobre las infraestructuras dialogando con la región, en lugar de imponer decisiones y exigir silencio, sin siquiera reunirse con el territorio para abordar las infraestructuras fundamentales que necesita Andalucía.
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