En un contundente comunicado, el Ejecutivo ha decidido denunciar a la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) por su negativa a abordar la reducción de la jornada laboral, medida que ha sido objeto de intenso debate en los últimos meses. Según el Gobierno, la actitud de la patronal española atenta contra el diálogo social y la democracia, al no querer ceder en una cuestión que afecta directamente a la calidad de vida de los trabajadores. Esta decisión supone un grave revés para las relaciones entre el Ejecutivo y la CEOE, y abre un nuevo frente de conflicto en el panorama laboral español.
El secretario de Estado de Trabajo, Joaquín Pérez Rey, ha calificado la oposición de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) a reducir la jornada laboral como una burla al diálogo social y a la democracia.
En rueda de prensa, Pérez Rey ha manifestado que la postura de la patronal ha sido claramente decepcionante e incomprensible y ha destacado que después de meses de negociación, CEOE y Cepyme no pueden seguir en el no a todo y buscando la manera de que la reducción de jornada al final no se aplique.
No le vamos a decir a los ciudadanos que lo que ganan por un sitio lo pierden por otro, que la reducción de jornada a 37 horas y media se va a compensar haciendo más horas extras en un país donde las horas extras son una lacra y la mayoría de las veces no se pagan, ha afirmado el secretario de Estado de Trabajo.
Ante la negativa de la patronal, el Gobierno ha decidido seguir avanzando de la mano de los sindicatos para pulir un texto que cuanto antes pueda ser remitido a las Cortes Generales. Se espera cerrar el acuerdo con los sindicatos en los próximos días para llevar el texto como anteproyecto de ley al Consejo de Ministros en primera vuelta y después a las Cortes una vez que pase todo el trámite consultivo.
Es importante destacar que la reducción de la jornada laboral es un tema que ha generado gran debate en los últimos tiempos. En otros países, como Grecia, se permiten jornadas de seis días o 48 horas semanales en algunas empresas, lo que ha generado una gran polémica.
En España, el Gobierno y los sindicatos buscan encontrar un acuerdo que permita reducir la jornada laboral sin afectar la productividad y el bienestar de los trabajadores. Sin embargo, la oposición de la patronal ha generado un escollo en el proceso de negociación.
El diálogo social es fundamental en este proceso, y la negativa de la patronal a reducir la jornada laboral ha generado una crisis en este sentido. El Gobierno y los sindicatos esperan encontrar una solución que beneficie a todos los involucrados.
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