En los próximos días, un importante cambio en el panorama de la conectividad en España traerá consigo la desaparición del servicio ADSL, dejando a muchas personas sin conexión a internet. Esta decisión, que afectará a un gran número de usuarios en el país, generará un impacto significativo en la vida diaria y en la forma en que nos relacionamos online. La transición hacia nuevas tecnologías y la obsolescencia del ADSL plantean un desafío para aquellos que dependen de este servicio para sus actividades cotidianas. Es crucial que los usuarios afectados estén preparados para afrontar esta transformación y buscar alternativas para garantizar su conectividad en un mundo cada vez más digitalizado.
Telefónica anuncia el fin del ADSL y la desconexión de la red de cobre en España
La empresa de telecomunicaciones Telefónica ha comunicado oficialmente la desaparición de los servicios de acceso a internet a través de la tecnología ADSL que funcionan sobre la antigua red de cobre en España. Se espera que este cambio se produzca el próximo 19 de abril, coincidiendo con el centenario de la compañía.
Según informa Banda Ancha, la decisión de Telefónica responde a su estrategia de migrar por completo los servicios de ADSL a la fibra óptica, ofreciendo así una mejor calidad de servicio y una mayor eficiencia en la prestación de internet a los usuarios. Este proceso de migración ha sido comunicado a los clientes afectados con antelación, a través de diversos medios como cartas, SMS, llamadas telefónicas e incluso burofax.
A pesar de los esfuerzos de Telefónica por informar a sus usuarios, todavía se estima que alrededor de 444.000 líneas de ADSL en España se quedarán sin conexión a internet si no realizan el cambio a la fibra óptica a la brevedad. Esta cifra se basa en datos recientes de la CNMC correspondientes al mes de enero.
La tecnología ADSL, que permitía la conexión a internet a través de la línea telefónica tradicional, ha quedado obsoleta frente a la fibra óptica, que ofrece mayores velocidades y prestaciones. Telefónica inició su transición a la fibra óptica en 2007, sustituyendo gradualmente la red de cobre por esta nueva infraestructura.
Con la implementación masiva de la fibra óptica, Telefónica ha ido cerrando progresivamente sus centrales de cobre, ya que han quedado obsoletas ante las ventajas significativas de la nueva tecnología. A partir del 19 de abril, los clientes de Telefónica que mantengan servicios de ADSL perderán la conexión a internet en sus hogares, debiendo recurrir a alternativas como la red móvil o el acceso fijo radio (AFR) en zonas rurales, según lo detalla la CNMC.
Esta transición marca un hito en la evolución de las telecomunicaciones en España, impulsando la adopción de tecnologías más avanzadas y eficientes para el acceso a internet. Es fundamental que los usuarios que aún cuentan con servicios de ADSL se pongan en contacto con sus proveedores de servicios para realizar la migración a la fibra óptica y evitar quedar desconectados a partir del 19 de abril.
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