En lo que ha sido descrito como un clamor urgente, alrededor de 1.500 investigadores han alzado su voz en un pedido desesperado a la Universidad española. Bajo el lema ¡No nos dejen marchar!, este grupo de profesionales ha expresado su preocupación ante la fuga de talentos que actualmente enfrenta el país. La comunidad investigadora, clave en el desarrollo y progreso de la nación, insta a las autoridades universitarias a tomar medidas concretas para frenar esta situación alarmante. La demanda de mejores condiciones laborales, oportunidades de crecimiento y estabilidad en sus puestos de trabajo resuena con fuerza en un llamado que busca preservar el capital humano y científico de España.
Investigadores del programa María Zambrano claman por estabilidad laboral en España
Julia Chacón, doctora en Biología, volvió a España con el programa María Zambrano. No merecemos más que el resto, pero si nos trajisteis a España después de la pandemia con un programa de atracción de talento internacional, no nos dejéis marchar, expresa.
Científicos temen dejar el país al finalizar sus contratos
Julio Villa-García, doctor en Lingüística y uno de los 1.500 científicos del programa María Zambrano, alerta que al finalizar sus contratos se ven fuera de la Universidad y posiblemente fuera de España, sin opciones de estabilización laboral.
Universidades españolas enfrentan crisis al retener talento internacional de alto nivel
La doctora Chacón y otros investigadores del programa María Zambrano expresan su preocupación por la falta de políticas de retención de talento en las universidades españolas, lo que los obliga a aceptar contratos temporales de menor estatus y salario.
No nos dejéis marchar. Ese es el grito que lanza Julio Villa-García, uno de los investigadores del programa María Zambrano, que denuncia la falta de estabilidad laboral al finalizar sus contratos y la posibilidad de tener que abandonar España.
Julia Chacón y otros investigadores postdoctorales reclaman una solución a la ministra de Universidades, Diana Morant, para poder permanecer en España y continuar contribuyendo con su talento y experiencia en el ámbito científico.
Las universidades españolas, beneficiarias de fondos europeos, se defienden argumentando que el programa María Zambrano no contemplaba la estabilización laboral de los investigadores postdoctorales, lo que genera una crisis al retener el talento internacional de alto nivel.
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